En abril del 2012, un furgón cargado con café en polvo fue robado en El Congo, Santa Ana. Varios policías participaron en el atraco. Pero la banda no iba tras el café como botín, sino tras 10 millones de dólares que aparentemente eran transportados en el mismo furgón en compartimentos secretos (caletas). Pero resultó que el camión sólo transportaba el café.
Por ese y otros ocho robos, dos miembros de la Policía Nacional Civil (PNC) fueron condenados a 10 años de prisión, hace unos días, por ser parte de una banda que se dedicaba al robo de vehículos, robo de furgones con mercadería y asaltos a usuarios de banco. Otras 17 personas recibieron también condenas que oscilan entre los 10 y 20 años de prisión por parte del Juzgado Especializado de Sentencia de Santa Ana.
Rafael Antonio García Villalta y Samuel Elías Díaz Pérez son los policías que deberán purgar sus condenas en el centro penal de Metapán, a donde el juez Rodolfo Linares Ascencio los envió, luego de finalizar la vista pública contra la banda denominada “Los Vides”. Diecisiete convictos más fueron enviados a cumplir sus sentencias a diferentes centros penales.
De acuerdo con las investigaciones judiciales, la banda estaba muy bien organizada, tanto así que decidieron robar, a saber a qué banda de narcotraficantes, un alijo de 10 millones que supuestamente sería transportado en un furgón con mercadería.
Sin embargo, ese “tumbe” (robo) de dinero no se concretó. Al registrar el contenedor, no hallaron el alijo de billetes y tuvieron que conformarse con la mercadería, cuyo valor sobrepasaba los 100 mil dólares, según el proceso judicial.
Falsos retenes
En algunos atracos, los policías usaban sus uniformes, armas y conos reflectivos para establecer falsos retenes en varios tramos de la carretera de San Salvador hacia Santa Ana y viceversa.
La función de los dos policías, dentro de la organización, era proporcionar armas o indumentaria policial a otros miembros de la banda para que, juntos, establecieran retenes en los puntos de carretera por donde pasarían los camiones cargados con mercadería.
Una vez que los motoristas de los furgones se bajaban para entregar la documentación a los policías, éstos revelaban la verdadera intención del “retén policial”: era un asalto. Luego llevaban el furgón a bodegas clandestinas de la banda donde se repartían el botín.
Sin embargo, la banda no solo robaba furgones, también se dedicaba a robar vehículos y a asaltar a usuarios de banco luego de que estos salían de hacer las transacciones financieras. Para ello, algunos miembros de la banda se introducían a las agencias bancarias para seleccionar a sus víctimas.
Posteriormente se comunicaban con los compinches que estaban afuera de las agencias a quienes les daban las características de las personas que habían retirado fuertes sumas de dinero.
Un oficial de la Fuerza Armada fue víctima de estos delincuentes, pues lo atracaron luego de que cambió un cheque por más de cinco mil dólares, según el proceso judicial.
Cabecillas andan libres
La banda de Los Vides fue capturada a principios de noviembre de 2014, cuyos cabecillas, según el proceso judicial, son los hermanos Felipe de Jesús y José Guadalupe Vides Vides, ambos originarios de Sonsonate.
José Guadalupe es el propietario, desde el año 2009, de una empresa de transporte de carga a nivel internacional, según documentos públicos del Centro Nacional de Registros (CNR), y también está registrado como proveedor de servicios de transporte a la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA) durante el año 2015.
No obstante, los hermanos Vides Vides y otros tres imputados no fueron sentenciados por el juez Linares Ascencio debido a que no se presentaron, pese a ser citados, a la vista pública (juicio) pues a ambos les sustituyeron la prisión preventiva por arresto domiciliario con vigilancia policial, ordenado por el Juzgado Especializado de Instrucción de Santa Ana durante la audiencia de imposición de medidas.
Ese mismo juzgado, durante la audiencia de imposición de medidas, se declaró incompetente para continuar conociendo el caso y remitió los procesos a tribunales de sentencia de instancia común, según el lugar donde la banda había cometido los atracos.
Parte del proceso que correspondía al caso del robo del furgón donde supuestamente se transportaban los 10 millones de dólares, según la declaración de un testigo criteriado (con beneficios penales) durante la vista pública, fue remitido al Tribunal de Sentencia de Sonsonate.
Posteriormente, el juez suplente del Tribunal de Sentencia de Sonsonate, a donde había sido remitido el proceso contra los hermanos Vides Vides, se declaró incompetente y envió el proceso al Juzgado Especializado de Sentencia de Santa Ana.
Días después, la jueza propietaria del Tribunal de Sentencia de Sonsonate le solicitó al juez Especializado de Sentencia, que le devolviera el proceso judicial contra los hermanos Vides Vides, pues había decidido declararse competente para juzgarlos.
Al finalizar el juicio, el pasado 16 de mayo, Linares Ascencio giró órdenes de captura contra los hermanos Vides Vides luego de no presentarse a la vista pública.