Más de 15 mil salvadoreños mejoraron su calidad de vida el año pasado, gracias a los proyectos integrales ejecutados por la Fundación Rafael Meza Ayau (FRMA). La inversión social alcanzó los 680 mil dólares, financiado en 60% con fondos propios y el resto con una contrapartida de aliados.
El aporte de la fundación, que inició hace 45 años, está enfocado en las áreas de salud, educación y protección al medio ambiente, décadas en la que también ha promovido y compartido el conocimiento mediante la creación de espacios de entendimiento y capacitación superior a personas y organizaciones dedicadas al desarrollo.
Los proyectos se ejecutan con enfoque territorial y de la mano con 20 Organismos No Gubernamentales (ONG) y junto a las comunidades beneficiadas.
Roberto Murray Meza, presidente de la Fundación, destacó que el año pasado lograron implementar 29 proyectos de impacto social, un taller de capacitación a instituciones aliadas bajo el concepto “replicando conocimientos”; y el Foro Informándonos en el que se analizó la realidad salvadoreña.
Añadió que la entidad cuenta con unos 65 voluntarios, quienes donaron 1,200 horas hombre a través de voluntariados, programa de mentoría, trabajo pro bono de la Fundación a otras ONG y de Grupo Agrisal a la Fundación.
El programa de intervención rural llamado “Salamar”, que tiene un enfoque en educación, salud e interés comunitario, también es parte de las grandes satisfacciones que le dejó 2015 a la fundación.
Al igual que otros proyectos como: la intervención urbana “La Escalón”, que es parte de comunidades sostenibles; el desarrollo del anexo del centro médico para el tratamiento del cáncer infantil; y la remodelación del ala pediátrica del Hospital San Juan de Dios, en Santa Ana, en donde se ejecutarán una serie de obras de mejoramiento a lo largo de los próximos años.
Murray Meza detalló que en el caso de La Escalón, el apoyo está enfocado en la creación de microempresas y la facilitación de microcréditos, con lo que se ha mejorado la calidad de vida de las familias beneficiadas. Un modelo similar se está impulsando en las comunidades aledañas a Plaza Mundo, en Soyapango.
Para el empresario la educación media y superior en ingeniería son claves para el país, por lo cual en los próximos años estará concentrando el apoyo en esas áreas.
“Un nuevo look”
La presentación de los resultados que la Fundación obtuvo el año pasado, ocurrió el jueves pasado, cuando también lanzaron la nueva estrategia interna, que incluye la utilización de un logo con tipografía más simple y colores más frescos y brillantes.
El nuevo logotipo está basado en el concepto: “Por él, por vos, por El Salvador”, que es una descripción de la tarea solidaria que realiza.
Con el nuevo “look” el organismo busca darle un mayor impulso a la labor altruista que ha desarrollado y construido desde su fundación en beneficio de los más desposeídos del país.
La nueva estrategia es un homenaje al compromiso solidario de su fundador, don Rafael Meza Ayau, e incluye un nuevo modelo de inversión guiado por la Filantropía de Alto Impacto.
Murray Meza explicó que ese proceso de renovación, posicionamiento y nueva imagen comenzó en 2013, cuando también se aprobó la planificación estratégica para los próximos cinco años.
El proyecto busca reflejar las nuevas estrategias, dar un nuevo impulso a nuestra institucionalidad y generar un alto impacto, expresó el empresario durante la presentación de la nueva estrategia, imagen y logros obtenidos el año pasado.
“Con el giro en su estrategia de trabajo implementada durante 2015, nos dimos cuenta que la FRMA también necesitaba de un cambio en su marca, que mostrara una imagen alineada a la nueva estrategia, así como una nueva manera de seleccionar y ejecutar nuestros proyectos”, aseguró Carla Meyer de Dumont, directora ejecutiva de la Fundación.
El nuevo modelo de inversión, llamado 70,20, 10, se basa en los ejes: alto impacto familia, y legado y formación social, a través de los cuales se ejecutan proyectos integrales con enfoque territorial, sociales y foros.
De Dumont reiteró que el cambio de estrategia interna obedece a la búsqueda de un trabajo más planificado y con redefinición de objetivos.
La Fundación, que nació en 1971, ha consolidado un legado de solidaridad y compromiso con la sociedad salvadoreña, con una inversión que a la fecha ronda los 20 millones de dólares en diferentes obras. En la actualidad, la Fundación tiene estimada una inversión anual que ronda entre los 500 a 700 mil dólares, que se distribuye en diferentes áreas de trabajo.
El organismo está integrado por descendientes de la familia Meza Ayau y se dedica identificar los problemas sociales del país, pero sobre todo, las posibles soluciones.