Grupos de choque protestaron esta mañana frente a las instalaciones de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP) para forzar al sector empresarial a que acepte la propuesta del Gobierno para el incremento del salario mínimo.
Según relató el presidente de ANEP, Luis Cardenal, la protesta incluyó insultos hacia los miembros de la gremial y se mantuvo como rehenes a los empleados, quienes no pudieron entrar ni salir del local con libertad.
El Ministerio de Trabajo y su representación en el Consejo de Salario Mínimo, se apresuraron a desmarcarse de la actividad con un comunicado. “Si a los directivos de la ANEP les preocupa que la ciudadanía rechace su propuesta, deberían modificarla y proponer un aumento justo”, se leía en el documento.
Cardenal criticó que se intente disimular la actividad cuando en realidad se trata de “agitadores profesionales”.
La principal vocera de la protesta “en todos lo temas que el FMLN busca apoyos, está presente. Ella está en los grupos de salud, de agua, de seguridad alimentaria… cómo no vamos a entender que es un intento de intimidación de parte del Ministerio de Trabajo”, explicó Cardenal.
El líder empresarial dijo que estas acciones no ayudan al clima de diálogo que ANEP intenta construir junto al Gobierno. “Mantenemos que ante los problemas estamos comprometidos a hacer nuestro mejor esfuerzo… esto no nos va a hacer retroceder, pero si el Gobierno no quiere que lleguemos a entendimientos, no generan ningún beneficio”, comentó.
Sumale al mínimo! Es la campaña de las organizaciones que protestan hoy contra la ANEP. pic.twitter.com/OOIHWD9sT8
— Guadalupe Taura (@oigasebien) 30 de mayo de 2016
Contradicciones
Cardenal criticó que con estas acciones el Gobierno y sus grupos de choque están siendo incoherentes con su discurso.
Por un lado, señaló, que el Ministerio abandonó el Consejo de Salario Mínimo argumentando que se rompió un acuerdo de confidencialidad, pero una de las consignas de la protesta era que la discusión sea pública y transparente.
Por otro lado, Cardenal dijo que dos sectores que han tenido dificultades para alcanzar un acuerdo (empresas y sindicatos) hoy han estado más cerca. “El Gobierno que debería propiciar entendimientos es el que se está oponiendo”, dijo.
El empresario concluyó haciendo un llamado a la reflexión y al uso de argumentos en las discusiones. “Si quieren que las cosas mejores, que la crisis cambie, tienen que cambiar esa actitud, tener más respeto a las posiciones diferentes”, añadió.