WASHINGTON. - Las reservas de petróleo de Estados Unidos descendieron la semana pasada en 4.9 millones de barriles y se situaron en 529.9 millones, pero siguen en máximos históricos en ocho décadas, informó ayer el Gobierno estadounidense.
La cifra sorprendió a los analistas, que habían proyectado un nuevo aumento en las reservas de unos 3 millones de barriles, después de siete semanas consecutivas de crecimiento.
En el momento de apertura de la bolsa de Wall Street, el precio del barril de petróleo de Texas (WTI), de referencia en Estados Unidos, subía un 2.59 % y cotizaba en Nueva York a 36.82 dólares.
En las últimas cuatro semanas, las importaciones de crudo promediaron unos 7.8 millones de barriles al día, un 2.1 % por encima que la media del mismo período del año pasado.
Según el informe semanal del Departamento de Energía de Estados Unidos, las reservas de gasolina aumentaron la semana pasada en 1.4 millones de barriles.
Por su parte, las reservas de combustibles destilados como el diésel aumentaron en 1.8 millones de barriles, hasta los 162.9 millones.
Las refinerías del país trabajaron a un 91.4 por ciento de su capacidad instalada, por encima del 90.4 % de la semana anterior. – EFE