Según creencias populares, cada persona tiene siete caras parecidas alrededor del mundo. Esta teoría se reafirma cuando vemos en la televisión, en la Internet, en una película, en la calle o en otro lugar público a alguien muy parecido a nuestros vecinos, compañeros de trabajo o familiares. Ante esta situación, el asombro nos asalta de inmediato y hasta nos hace reír.
Sin embargo, ese asombro se intensifica cuando nos damos cuenta que ciertas personas conocidas de nosotros –incluyendo los famosos del espectáculo– son idénticas a algunos personaje históricos que ya fallecieron. En los casos cuando se presentan imágenes de celebridades junto a individuos del pasado cuyo parecido es alucinante, se suele hablar hasta de reencarnación.
Puede ser que se trate de algún capricho de la naturaleza o que sea producto de la casualidad, pero una cosa resulta evidente cuando las dos imágenes se colocan juntas: pareciera ser la misma persona situada en épocas distintas.
Dele un vistazo a las siguientes imágenes.
John Bro (abolicionista americano) y Charlie Sheen, comediante y actor.
Henry David Thoreu, escritor del siglo XIX y Ellen Degeneres, presentadora de televisión.
Charles Darwin y George Carlin (comediante norteamericano).
Felipe IV (antiguo rey de España) y Mark Zuckerber (creador de Facebook).
Antigua estatua egipcia y Michael Jackson.
Miss Lady Elsie (actriz e intérprete de comienzos del siglo pasado) y la actriz Rachel Weisz.