Prince dejó un patrimonio de 300 millones de dólares (266 millones de euros), según estima Los Angeles Times. Pero la identidad de la persona que heredará esta gran fortuna sigue sin revelarse.
Prince se divorció dos veces y no tiene descendencia. Sus padres murieron hace años. Sus representantes tampoco han mencionado si el cantante escribió su testamento antes de morir, por lo que la única hermana del artista, Tyka Nelson, podría ser su heredera.
Las leyes de Minnesota, lugar donde residía Prince, indican que de no tener ningún hijo, esposa o padres el dinero pasa a sus hermanos. De acuerdo su agente, Owen Husney, la fortuna del cantautor está valorada hasta el momento de su muerte en 300 millones de dólares y su catálogo musical en más de 500 millones de dólares, lo que suman más de 800 millones (711 millones de euros).
Esta cifra podría aumentar en los próximos meses gracias a la revalorización de todo lo relacionado con el nombre de Prince. En los tres días que siguieron a su muerte, se han vendido cerca de 600.000 álbumes del artista, un incremento de un 42% sobre el volumen de ventas en los días previos, según Nielsen Music.
Tyka Nelson, de 55 años, es la hermana menor del fallecido cantante. Quiso ser artista, sin embargo su carrera no despegó como la de su hermano mayor (se ha dedicado a la música y ha lanzado seis álbumes, el último en 2008 de música góspel).
La relación entre ambos fue difícil durante años debido a la adicción a las drogas de Tyka (estuvo enganchada al crack) y a su incursión en el mundo de la prostitución. Llegó a decir que lo hacía para proteger y sacar adelante a sus hijos menores de edad. La prensa americana informa que en 2003 entró en rehabilitación y desde entonces mejoró su relación con Prince.
(Con información de abc.es)