Según la fundación venezolana Con Valores, “la convivencia en la familia es muy importante para el equilibrio y la salud de cada uno de sus miembros” y estas vacaciones son la oportunidad para demostrar que existen muchas maneras para fomentar la comunicación, la paz y la misma convivencia a través de sanas actividades, sin necesidad de salir de casa.
1) Los Videojuegos
Padres e hijos pueden enfrentarse a una batalla impresionante, competir y distraerse largas horas con videojuegos. Aunque muchas personas los asocian con problemas de conducta, hiperactividad, déficit de atención y de relaciones sociales, el periódico British Medical publicó un estudio que reveló la no existencia de un vínculo entre la exposición de los juegos y este tipo de problemas. Al contrario, la Universidad Estatal de Michigan demostró que los videojuegos te convierten en una persona más creativa. Por otra parte, la Universidad de California sostuvo que previene el desgaste cerebral por un equivalente de hasta siete años. ¡Pruébalo!
2) Haz manualidades
Haz de la plastilina tu aliado en estas vacaciones y crea figuras de todo lo que quieras. También puedes pasar un rato entretenido practicando origami, bisutería, intenta bordar o hacer mosaicos con papel.
La psicóloga Catalina Pousa está de acuerdo en que este tipo de actividades mejoran la psicomotricidad, ya que todos los sentidos se deben coordinar. Hacer manualidades ayuda a la concentración y la autoestima se ve mejorada porque se aprende de lo que una persona es capaz de hacer y hay formas de cómo demostrarlo, porque lo elaborado es tangible. Por último, beneficia la comunicación en familia, porque hay un constante intercambio de ideas y opiniones que fomentan la solidaridad y otros valores.
3) Cocinen juntos
Los beneficios que reciben los niños al cocinar son muchos, por un lado desarrollan mejor sus sentidos, capacidades motoras, exploran y desarrollan una conexión positiva con todos los alimentos: frutas, verduras y vegetales, entre otros, aprendiendo lo nutritivos y sabrosos que son.
4) Juegos tradicionales
Puedes entretenerte en familia con los juegos tradicionales que conozcas y otros que te presentamos a continuación. Muchos de ellos son un clásico, como las escondidas. Puedes jugarlo por la noche y que todos utilicen una lámpara para ubicar a quien debe buscarlos. También prueba decir adivinanzas o trabalenguas. Pero si te gusta la emoción, inventa carreras en casa o juega a la gallinita ciega. Además de quemar calorías, unes más los lazos entre familiares.
5) Juegos de mesa o tableros
Algunos de los más conocidos son el Monopoly, Pictograma, UNO, Jenga, el ajedrez, damas chinas o dominó, entre otros. De acuerdo a Phyllis Naegeli, experta en educación en casa, este tipo de juegos mantiene la mente activa, mientras aumenta la capacidad de aprender, ya que todos presentan un desafío que obliga a buscar una solución, por eso este tipo de juegos es más que un simple entretenimiento. Algunas cosas extras que se aprenden son: seguir indicaciones, respetar las reglas y aprender del carácter de los demás y descubrir si eres competitivo, diplomático, te comunicas bien o si eres paciente.