Santanecos se quejan de sonido estridente

Quejas de personas a causa del ruido aumentan cuando hay fechas festivas. Multas podrían llegar hasta los $571.

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Los agentes del  CAM verifican que los locales tengan permisos para vender bebidas alcohólicas. 

/ Foto Por EDH

Por Jonathan Henríquez

2016-03-20 4:00:00

Santanecos exigen a la alcaldía que aplique la Ordenanza Reguladora de la  Contaminación Ambiental, debido a que algunos establecimientos mantienen música a volúmenes indebidos ya entrada la noche.

Jorge Ventura, que reside en las proximidades del Hospital San Juan de Dios, opinó que a través de dichas normativa se tiene que resguardar la tranquilidad de las personas.

“El alto volumen de los aparatos de sonido no dejan dormir”, lamentó.

 La ordenanza, que regula la contaminación a causa de sonidos estridentes, establece que a partir de las 11:00 de la noche la intensidad del sonido no puede ser mayor a 70 decibeles en las zonas industriales y comerciales.

Sin embargo, la alcaldía, a través de procedimientos hecho por miembros del Cuerpo de Agentes Municipales (CAM) han encontrado que en algunos locales, donde también se comercializan bebidas embriagantes, el sonido es de hasta en 140 decibeles.

Eso ha llevado a que la alcaldía haya abierto, desde mayo del año pasado, 16 procesos sancionatorios en contra de establecimientos.

El juez contravencional, quien pidió omitir su nombre por seguridad, explicó que las multas  oscilan entre $114.28 y $571.

En promedio, desde mayo pasado, cada mes reciben cinco denuncias de los ciudadanos por sonido estridente; sin embargo, cuando estos incluyen fechas festivas, el número se eleva a 15 en el mismo periodo. 

Operativo

El Cuerpo de Agentes Municipales (CAM) realizó recientemente un operativo por diferentes establecimientos para hacer cumplir la Ordenanza Reguladora de la Contaminación Ambiental; además de la Ordenanza Reguladora del Comercio de Bebidas Alcohólicas.

Algunos negocios, ubicados sobre la 8a. avenida Sur y la 11a. calle Poniente, presentaron resistencia durante la inspección hecha por la dependencia municipal, por lo que tuvieron que pedir refuerzo a miembros de la Policía Nacional Civil (PNC).

Los empleados de esos locales no permitían el ingreso de las autoridades.

El registro a los lugares determinó que los propietarios no contaban con licencia vigente para la comercialización de bebidas alcohólicas y, además, de rockolas. 

El CAM decomisó dichos productos.

En otro negocio, ubicado en la 2ª Calle Oriente, entre la 19a. y 21a. Avenida Sur, realizaron el decomiso de aparatos de sonido por exceder los decibeles permitidos; además, por estar a menos de 40 metros de un hospital privado.

Tenía el sonido a 80 decibeles; tampoco contaban con el pago del permiso para contar con música.

La representante del CAM a cargo del operativo, quien también pidió omitir el nombre, expresó que la inspección la realizaron en los lugares que registran el mayor número de quejas. Aunque también incluyeron otros lugares.

Durante la actual administración municipal, el personal del CAM ha realizado dos operativos nocturnos; ya que las dos de la mañana es la  hora límite  establecida para que los establecimientos comercialicen bebidas alcohólicas.

Las  multas que son impuestas al establecimiento comercial por vender bebidas alcohólicas sin el permiso respectivo  equivalen al 10 por ciento del   valor del producto. 

Documentación en regla

La alcaldía pide a los propietarios de los establecimientos tener en orden su documentación o de lo contrario presentarse al punto de atención empresarial en la comuna para legalizar su documentación.

A las personas que están en regla les recomendó denunciar negocios que no están regularizados, ya que al no pagar matrículas correspondiente se vuelven una competencia desleal para las personas.