Uno de los dos miembros de la Mara Salvatrucha (MS-13) que el pasado 2 de febrero fueron capturados por asesinar al motorista de un microbús del transporte público de la ruta 33-A quedó en libertad sin ninguna restricción.
El 2 de febrero, José Isidro García Mejía, de 28 años, y un menor de 17 fueron capturados segundos después de acribillar a Walter Vladimir Díaz Aguirre, de 20 años, en momentos en que llevaba pasajeros hacia Mejicanos.
Al momento de ser capturado, el adolescente dijo a los policías que era mayor de edad y como tal lo presentaron a periodistas que llegaron a cubrir el crimen.
Luego de que la policía diera detalles del hecho, mientras los dos sospechosos permanecían hincados con las armas al frente, mismas que les habían decomisado, el menor confesó que había matado a Díaz Aguirre porque era de la pandilla 18 y porque días antes le había intentado matar a la madre.
Pese a la confesión, el menor fue puesto en libertad tres días después del crimen. A través de la oficina de prensa del Centro Judicial Isidro Menández, el juzgado en mención dijo que no se tuvo por establecida la participación del joven en el crimen contra Díaz Aguirre porque la Fiscalía no había presentado los suficientes indicios contra él.