Ástrid Gabriela, de sólo seis meses de edad, se convirtió en el cuarto infante en morir por balas disparadas por pandilleros. Esa es la cifra de niños asesinados durante febrero. En menos de ocho días.
La niña fue baleada el pasado domingo a la 1:10 de la tarde en el pasaje 5, block F, casa número 32 de la residencial Altavista, municipio de Ilopango, ataque en el cual murió su tía, Julia Graciela Funes Morales, de 23 años.
Tanto Julia Graciela como Ástrid Gabriela fueron trasladadas al hospital de San Bartolo, pero la primera murió en el trayecto, en tanto que la niña, con una herida en la pierna, murió hasta ayer en la mañana, confirmaron policías de Soyapango.
Entre el martes de la semana anterior y el domingo pasado, cinco niños fueron baleados en ataques perpetrados a personas adultas por parte de miembros de pandillas. Cuatro de ellos han muerto. Un niño de siete años se encuentra en estado crítico.