La esposa de Kanye West está dispuesta a todo para lograr rebajar los 24 kilos que ha ganado en los últimos meses.
La celebrity, de 35 años, ha demostrado en varias ocasiones que no le teme a nada con tal de verse bien. Pero ahora los medios internacionales afirman que Kim se someterá a una auténtica remodelación.
“Quiere hacerse una operación de senos, eliminar michelines y una liposucción”, asegura una fuente citada por Radar Online.
Además de la liposucción con láser frío, eliminará la grasa extra de su parte trasera, se inyectará bótox, levantará sus atributos delanteros y repetira el ‘lifting vampírico’ (inyectarse sus propias plaquetas en la cara para conseguir un rejuvenecimiento).
Hace unos días Kim fue fotografiada en un edificio de Beverly Hills que alberga una clínica, sin que se haya confirmado cuál era el motivo de la visita.
En las imágenes aparecía delgada y cubierta por un abrigo, sonriente después de haber dado a luz a su segundo hijo, Saint.
Varias revistas internacionales hablan de cifras concretas a la hora de detallar las operaciones a las que se someterá.
Se estima que la Kardashian podría llegar a gastarse la cifra de 90.000 euros, una cantidad alarmante, pero que parece baja teniendo en cuenta que baraja una fortuna de 45 millones de dólares gracias a sus negocios de líneas de ropa y de perfumes.