¿Quieres ser astronauta? Pues si tienes un título superior, tres años de experiencia en tu campo o mil horas de vuelo como piloto al mando en aviones de reacción estás de suerte porque cumples los principales requisitos que pide la NASA para formar parte de su selecto grupo de astronautas.
La NASA ya ha empezado a recoger las solicitudes de los futuros astronautas, los que llevarán a cabo las nuevas tareas de exploración espacial, entre ellas, la primera misión tripulada al planeta Marte.
La agencia recogerá las solicitudes hasta mediados de febrero de 2016, y anunciará la lista de seleccionados a mediados de 2017.
Los candidatos deben ser licenciados (en una institución acreditada) en ingeniería, ciencias biológicas, ciencias físicas o matemáticas y tener, al menos, tres años de experiencia profesional relacionada, con responsabilidades crecientes, o un mínimo de 1.000 horas vuelo como piloto al mando en aviones a reacción.
Las solicitudes deben ser enviadas a la web de la NASA: http://www.usajobs.gov.
Los elegidos podrían volar en cualquiera de las cuatro naves espaciales estadounidenses: la Estación Espacial Internacional (EEI), las dos naves espaciales comerciales tripuladas que actualmente se están desarrollando por empresas de Estados Unidos, y Orión, el vehículo que está desarrollando la NASA para viajes de exploración al espacio profundo.
La NASA seleccionará a los candidatos más cualificados “de un grupo diverso de ciudadanos de Estados Unidos con una amplia variedad de orígenes”, informa la web de la agencia espacial.
“Este próximo grupo de exploradores espaciales estadounidenses inspirará a la generación de Marte para llegar a nuevos retos, y nos ayudará a alcanzar el objetivo de poner huellas de botas en el planeta rojo”, dijo el administrador de la NASA, Charles Bolden.
“Los seleccionados para este servicio volarán en naves espaciales hechas en Estados Unidos desde suelo estadounidense, realizando avances en la ciencia fundamenta y la investigación a bordo de la Estación Espacial Internacional, y ayudarán a empujar los límites de la tecnología en el campo de pruebas del espacio profundo.”
Y es que la NASA está llevando a cabo una transición sin precedentes a naves espaciales comerciales para el transporte de tripulación y carga a la Estación Espacial.
De hecho, los vuelos en el CST-100 Starliner de Boeing o en la cápsula tripulada Dragón de SpaceX permitirán salir al espacio sin tener que depender -como hasta ahora- de las naves rusas Soyuz.
Además, estos vehículos permitirán el traslado de hasta siete tripulantes en cada misión a la Estación.
Los elegidos para formar parte de la tripulación de la Estación continuarán el trabajo realizado durante los últimos 15 años de presencia humana continua a bordo del laboratorio orbital, ampliando los conocimientos científicos y probando nuevas tecnologías.
Su trabajo incluirá la constitución de misiones regulares de seis meses y de un año, actualmente en marcha a bordo de la estación, que sirven para saber más sobre la exploración humana y robótica de larga duración en el espacio profundo.
Además, el Sistema de Lanzamiento Espacial, SLS, de la NASA y la nave espacial Orión, actualmente en desarrollo, pondrán en marcha a los astronautas en misiones al campo de pruebas de la órbita lunar, donde la NASA aprenderá a realizar operaciones complejas en un entorno de espacio profundo antes de pasar a misiones de mayor duración en su viaje a Marte.
Hasta la fecha, la NASA ha seleccionado más de 300 astronautas, de lo que 47 están en activo, para volar en sus misiones cada vez más desafiantes para explorar el espacio y beneficiar la vida en la Tierra.