Las mujeres no escapan al espiral de violencia que cada día cobra más vidas en el país. El Instituto de Medicina Legal (IML) reporta al menos 475 casos de muertes violentas de mujeres entre el uno de enero y el 31 de octubre de este año.
Esto sin contar casos de niñas y adolescentes que también han sido asesinadas en distintos puntos del país. El IML registra un total de 596 casos de niños y niñas que también han muerto ha causa de la criminalidad
El décimo mes del año cerró con 676 asesinatos, 385 más de los registrados el año pasado en ese período, según el informe del IML, 66 de estos crímenes eran mujeres.
Aunque en menor número, ellas también están siendo blanco de la violencia, según las autoridades, en varios de los casos son asesinadas debido a su relación con pandillas.
La mañana del viernes, una joven fue asesinada a balazos dentro de una mototaxi.
El crimen ocurrió a eso de las siete de la mañana en la calle El Pito, en la colonia San Sebastián I, en Apopa.
La víctima identificada como Clarisa Angélica Vidal Hernández de 29 años, iba como pasajera en una mototaxi, cuando fue interceptada por dos pandilleros que operan en la zona, quienes le dispararon.
La policía afirmó que Vidal tenía al menos siete impactos de bala en distintas partes del cuerpo, hechos con una pistola calibre nueve milímetros.
“Fue interceptada (la víctima) por unas personas que a una distancia mayor de 50 centímetros le dispararon, se encontraron siete evidencias (casquillos) en la escena”, afirmó el oficial de servicio de la delegación de Apopa.
La zona donde fue asesinada Vidal, es territorio de la pandilla 18, y se presume que miembros de esta estructura cometieron el hecho.
Sobre el móvil, el jefe policial manifestó que la primera hipótesis que tienen es que fue cometido por rencillas entre pandillas. La víctima era pareja de un pandillero de la mara Salvatrucha que se encuentra recluido en un penal.
Tras el hecho, las autoridades rastrearon la zona, en busca de los hechores, pero no se reportaron capturas por el crimen.
Otro caso reciente de violencia contra féminas, ocurrió el jueves pasado en Izalco, Sonsonate, donde mataron con saña a madre e hija dentro de su propia casa.
Lidia Villeda, de 56 años, y su hija Brenda, de 24, fueron asesinadas con arma blanca y ladrillos, en su vivienda, donde también se encontraban tres niños.
Los vecinos dijeron que madre e hija estaban relacionadas con las pandillas y con “la hechicería”.
Otro feminicidio fue el de la menor Jazmín G., de 17 años, quien fue secuestrada el pasado 25 de octubre cerca de su casa, en San Juan Opico.
Las autoridades reportaron que su cuerpo fue localizado en el río Sucio, en el cantón San Lorenzo, en San Matías, La Libertad, sin embargo, el miércoles solo rescataron pequeñas partes de su cuerpo, lo demás, el río se lo habría llevado.
De acuerdo con los familiares, la Fiscalía General de la República de Santa Tecla, la Policía Nacional de Quezaltepeque, al igual que la Cruz Roja, la Cruz Verde de ese municipio y los Bomberos de Antiguo Cuscatlán, se mostraron renuentes a recuperar el cuerpo cuando aún estaba completo.
El miércoles, otra joven cuya identidad no pudo esclarecerse también fue ultimada en la colonia Altavista del municipio de Tonacatepeque, se cree que era pandillera.