Para cada problema, siempre hay una solución, muchas veces más cerca de lo que imaginamos.
Delimitar una propiedad privada, evitar el ingreso de “traviesos”, son situaciones que padece cualquier propietario de estas.
Un cero vivo no tiene por qué ser desagradable a la vista. Por el contrario, con creatividad y un poco de paciencia se puede aprovechar, para establecer verdaderos muros vivos que son prácticamente impenetrables.
Es igual en cultivares agrícolas, proyectos eco turístico, campos deportivos, ranchos de playa o de montaña. Para generar una bondadosa e impenetrable muralla de muralla, que nos defiende de toda amenaza, se puede tomar como base la siembra de matial, una planta de agudas espinas, que además de ser económica, es también ecológica, por ser reservorio de Carbono y productor de oxígeno.
Además de evitar la erosión, facilitar la penetración del agua al sub suelo, genera con su vistosa floración de color anaranjado, un atractivo paisaje y que definitivamente es impenetrable.
Decorativo
Por su abundantes y robustas espinas, sin lugar a duda un muro vivo de matial no se puede manchar ni penetrar. Lo único que requiere es poda periódica, para darle la altura y forma que se quiere.
Otra ventaja del matial es que fácilmente se desarrolla, sin importar el tipo de tierra, ni necesita de riego en el verano.
Se recomienda sembrar de cuatro a cinco plantas por metro lineal, para fortalecer el impacto paisajístico sin afectar la seguridad.
Podemos combinarlo con veraneras de diferentes colores, sembrándolas a cada metro de distancia, intercalando con el matial.
Se aprovecha que pueden dar mayor atractivo a una propiedad, así como seguridad, sin necesitar de gran mantenimiento.
Otra bondad de los setos combinados de matial y veranera, es que las aves podrán construir sus nidos, mientras las abejas y mariposas encuentran una fuente de néctar.
El vivero San Andrés brinda asesoría gratis para establecer estos muros vivos. Llame al 2305 0871.