En un escenario donde la lucha contra la corrupción y la transparencia en la gestión pública son fundamentales en el quehacer político, el papel de la sociedad civil para vigilar el Estado es fundamental, según el miembro de la organización peruana Estudiantes por la Libertad, Humberto Rotondo, que lidera una red ciudadana que promueve valores como la libertad y la democracia en el país andino.
En este sentido Rotondo, invitado por la organización de jóvenes salvadoreños Creo para el cierre de su seminario “Academia Libertad”, también enfatizó en que los sectores intelectuales y académicos del país tienen que construir paradigmas diferentes para que una nueva generación de políticos puedan desarrollar el cambio en el país.
Además recordó que ellos deben de influir en la sociedad, la cual debe de organizarse para denunciar atropellos a la libertad, como en casos donde existen amenazas a medios de comunicación y a derechos de la ciudadanía. En este punto incluso es clave, según Rotondo, el papel de organizaciones de investigación, conocidas como tanques de pensamiento.
“Nosotros, si nos organizamos, podemos vigilar al Estado y hacer que este funcione, sobre todo en temas donde debe de existir rendición de cuentas, transparencia y control ciudadano para evitar la corrupción. Yo creo que incluso los académicos y los políticos pueden trabajar juntos”, indicó el experto de Perú.
Por su parte Mauricio Alarcón, director de proyectos de la asociación ecuatoriana Fundamedios, recordó que en Latinoamérica hay corrientes políticas y de pensamiento que buscan restringir la libertad de expresión, por lo que hizo un llamado a la sociedad civil salvadoreña a estar organizada para denunciar estos posibles atropellos.
“En mi país lamentablemente quien tiene el poder (en alusión al gobierno del presidente Rafael Correa) pone barreras y ven a los medios de comunicación como un enemigo. La libertad de expresión es el motor de una sociedad democrática y por lo tanto desarrolla a los individuos”, analizó Alarcón.
Por otra parte el ecuatoriano advirtió que poner “leyes” para controlar la libertad de expresión es algo que generaría un retroceso a los avances que se han construido en la materia, lo cual afectaría los derechos humanos fundamentales de los ciudadanos.
“No se pueden crear por decreto censuras, el límite de la libertad de expresión se basa en la responsabilidad no en una ley o decreto”, indicó Alarcón.
Así Ricardo Avelar, director ejecutivo de CREO, subrayó la importancia de que el ciudadano pueda diferenciar a los medios de comunicación que ejercen el papel de vigilar y criticar las irregularidades de los gobiernos.
“Nuestra sociedad debe tener claro que los aparatos de propaganda son peligrosos para la libertad y la democracia porque no comunican las dificultades y los múltiples problemas sociales del país, solo sirven para ser aparatos mediáticos del régimen”, puntualizó Avelar.
En el seminario“Academia Libertad” participaron jóvenes salvadoreños de diferentes sectores que buscan incidir en temas políticos, económicos y de democracia y libertad.