Dos policías (un hombre y una mujer) fueron atacados ayer aproximadamente a las 6:10 de la mañana tras intentar frustrar un asalto a pasajeros de un autobús de la ruta 30, sobre la Primera Calle Poniente y 17 avenida Sur.
Ambos policías fueron trasladados a un hospital, pero el agente identificado como Salvador Edmundo Benavides López, murió mientras recibía atención médica, en tanto que el estado de salud de la agente se desconoce, pues hasta las 3:30 de la tarde de ayer, ninguno de los jefes policiales se había acercado a constatar cómo estaba la policía Kelly A.C., según señalaron sus compañeros.
La versión de la Policía Nacional Civil, sobre el hecho, es que ocurrió a las 6:10 de la mañana cuando los agentes se encontraban realizando un trabajo de investigación, ante las constantes denuncias de robos que se realizan dentro de autobuses en esa zona, según informó el comisionado Howard Cotto, subdirector de la corporación policial.
Los dos agentes, quienes vestían de particular debido a las exigencias del trabajo que realizaban, fueron alertados de que dentro de un autobús de la ruta 30, varios hombres iban asaltando a los usuarios.
Según Cotto, cuando los ladrones se bajaron de la unidad de transporte, los dos agentes intentaron capturarlos, pero un tercer delincuente que aún no se había bajado y del cual los policías no se percataron, les disparó a bocajarro.
“Era un agente ejemplar, muy dedicado a su trabajo tenía casi 15 años de servicio. Toda su carrera fue intachable”, comentó el subdirector.
Según Cotto, la pronta reacción policial permitió detener a tres sospechosos, a quienes el funcionario identificó como Denis Omar Jiménez, de 18 años, Ángel de Jesús Miranda Cuéllar, de 24, y Miguel Alfredo Urías López, de 32 años.
Este último, según el subdirector policial, tenía pendiente una orden de captura por el delito de robo.
Urías López, según la Policía, reside en el Barrio San Miguelito, comunidad Tutunichapa 2, Pasaje 4, muy cerca de una casa que ocupa la División Antipandillas.
Cotto afirmó que a los detenidos se les decomisó dos armas de fuego (un revólver y una pistola) con las cuales, dijo el subdirector, atacaron a los dos policías.
Las dos armas le fueron encontradas a Miranda Cuéllar. Así también se les decomisaron doce teléfonos celulares, dinero en efectivo y algunas prendas de valor que, supuestamente, habían robado a los pasajeros del autobús.
Tres en nueve días
Con el homicidio contra Benavides López, suman 56 los miembros de la PNC que han sido asesinados por diversas razones; en muchos casos, los homicidas han sido señalados como miembros de grupos terroristas de la Pandilla 18 y de la Mara Salvatrucha (MS-13).
Solo en este mes, grupos de pandillas han asesinado a tres elementos policiales: dos destacados en el Centro de Inteligencia Policial (CIP) y otro más asignado a Control Migratorio y Fiscal (que investiga tráfico de personas y contrabando).
El 19 de noviembre, el agente Jorge Antonio Martínez Flores, fue acribillado por la Pandilla 18, en el desvío a la Hacienda San Lorenzo, sobre la carretera que conecta Quezaltepeque con San Matías, departamento de La Libertad.
El 21 de noviembre, supuestos miembros de la Mara Salvatrucha asesinaron al agente Mario Meléndez Díaz, en la colonia Macarena, en el municipio de Santa Cruz Michapa, en el departamento de Cuscatlán.
Hace pocas semanas, el director de la PNC dijo a El Diario de Hoy que no todos los policías han sido asesinados por pertenecer a la corporación policial.
Recientemente, este Diario publicó varios casos de policías que fueron asesinados por razones que van desde intereses económicos hasta relaciones extra maritales con mujeres de pandilleros.