En el Centro Escolar General Tomás Regalado, de San Bartolomé Perulapía, en Cuscatlán, la mayoría de niños proviene de hogares de escasos recursos y según Marlene Elizabeth López de López, directora de la institución, “ellos esperan venir y que se les reciba con un vaso de leche y con los alimentos…”.
Entre esos pequeños hay uno que vive cerca de la escuela y al que le gusta la leche porque la maestra busca estrategias para que la consuman… a veces le pone chocolatito, galletitas.
“Para nosotros el reto es buscar las estrategias y poder conseguir el insumo que se necesita para poder elaborarlos, porque nosotros recibimos el arroz así en oro, el frijol, el aceite, pero usted sabe que para hacer un arrocito bien bueno que quede bien preparado y apetitoso hay que ponerle verdurita, cebolla”, dice la directora. Allí hay maestras encargadas de verificar que se dé el alimento y que los niños lo aprovechen.