Un asaltante hizo la fila como cualquier cliente en un banco y al llegar a la caja le mostró una misteriosa nota de papel al empleado.
De inmediato, el empleado comenzó a entregarle todos los fardos de billetes disponibles.
Luego el ladrón abandonó la sucursal sin alarmar a nadie.
El atraco ocurrió la mañana del 2 de octubre y hasta la fecha el departamento de policía local de Las Vegas del Norte no ha logrado identificar al delincuente, mucho menos encontrarlo.