LA UNIÓN. Hasta ayer los habitantes de las comunidades Candelaria de la Rompisión y Barrancones en el cantón Piedras Blancas de Pasaquina, recibieron ayuda y visita de las autoridades municipales, Cruz Roja y Protección Civil, debido a que era imposible entrar a esa zona por el desbordamiento del río Goascorán y a que este había cortado las calles de acceso.
Miembros de la comunidad confirmaron a El Diario de Hoy que el paso a sus comunidades se habilitó hasta ayer a las 11:00 de la mañana, luego que desde muy temprano, el sábado, quedó cortado por la anegación de los caminos.
Desde el viernes anterior, esas comunidades son afectadas por el debordamiento del Goascorán, debido a que la onda tropical que afecta el país, lo hizo aumentar de nivel, sin embargo, la situación empeoró la mañana del sábado, cuando el afluente registró un aumento considerable e inundó al menos 50 viviendas.
La situación para las familias afectadas fue tan critica que las autoridades de Protección Civil no ingresaron a la zona de las inundaciones porque no había manera de llegar vía terrestre.
El nivel del afluente comenzó a reducir ayer alrededor de las 10:30 de la mañana y los habitantes aseguran que recibieron la visita de personal de la alcaldía de Pasaquina y Cruz Roja Salvadoreña. Es decir que los afectados por inundación pasaron más de 24 horas anegados en sus casas y sin ayuda, por las condiciones del clima.
Se buscó la versión de Armando Guzmán, director departamental de Protección Civil, sin embargo no respondió a su móvil.
Cándida Rosa Turcios, directora de la escuela de Candelaria de la Rompisión, aseguró que para proteger a los estudiantes se han suspendido las clases, aunque dijo que el personal docente sí se presentará a la escuela.
Según Turcios, las calles y caminos de las comunidades están anegados y el río sigue fuera del cauce y puede provocar una desgracia si los estudiantes asisten. Pero el Mined ya suspendió las clases a nivel nacional.
No es para menos, las comunidades afectadas se ubican a más o menos 12 kilómetros de la carretera que de La Unión conduce a Pasaquina.De esos, según Ana Julia Álvarez, dirigente de la comunidad, hay al menos 4 km. que están anegados y son los que están previos a su sitio de residencia, en Candelaría de la Rompisión.
Incluso, la mujer explicó a El Diario de Hoy que decidieron no evacuar la zona, pues el único sitio de albergue es una escuela ubicada a siete kilómetros de las comunidades afectadas, pero para llegar debían cruzar la zona anegada, arriesgándose a que el río los arrastre.