El premio a la Mejora de la Atención Neonatal en Latinoamérica, otorgado por la Sociedad Iberoamericana de Neonatología (SIBEN), este año fue para el médico salvadoreño Carlos Enrique Flamenco.
El especialista denunció ante la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) a las autoridades del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) por el uso de un sedante con alcohol bencílico en neonatos con respiración asistida en la Unidad de Cuidados Intensivos.
Fue precisamente por ello que la propuesta de El Salvador fue seleccionada entre la de los 19 países participantes de Latinoamérica, España y Portugal.
Entre los trabajos competidores estaba el del Programa Canguro en Colombia y otro sobre el uso racional de antibióticos en Perú.
Flamenco recibió el premio el 11 de septiembre en San José Costa Rica, en el marco del XII Congreso de Neonatología SIBEN.
“Se entregó a un miembro por haber conseguido algo de trascendencia para el país y para la sociedad latinoamericana”, declaró Flamenco.
El especialista manifestó que el caso, por su trascendencia, fue conocido fuera del país y por ello los miembros del jurado lo tomaron en cuenta, entre ellos destacan reconocidos médicos como Augusto Sola y Sergio G. Golombek.
De acuerdo con Flamenco, recibir ese galardón “viene a reforzar el hecho de que hicimos lo correcto, el haber peleado por seis años, en diferentes instancias con el objetivo de quitar esta práctica venenosa para nuestros recién nacidos”.
El 17 de julio de este año, la Sala de lo Constitucional dio por establecida la vulneración al derecho a la salud de los bebés al prescribir el sedante con alcohol bencílico y ordenó a las autoridades del Seguro Social no utilizarlo en ese grupo de pacientes.
Flamenco interpuso la demanda ante la Corte Suprema de Justicia en 2012, tras varios años de dar avisos sobre esa práctica, ante varias instancias sanitarias, como la Junta de Vigilancia de la Profesión Médica y a las mismas autoridades.
Fue en 2009 cuando impartía una capacitación a las enfermeras de la UCIN del hospital Primero de Mayo, se percató que a los recién nacidos con respiración mecánicas se les aplicaba midazolam con alcohol bencílico de forma rutinaria.
Las autoridades del Seguro por años también negaron que usaran el sedante de forma rutinaria y alegaron que seguían las normas internacionales.
Ante al resolución de la Corte, el ISSS publicó en su cuenta de twitter el “@isss_gob_sv está obligado a cumplir la ley y resoluciones judiciales. En pocos días informaremos a @SalaCnalSV cumplimiento de su sentencia.”.
El neonatólogo indicó que la vida de los niños se encontraba amenazada y eso estaba por encima de otros intereses. Agrega que si volviera a conocer de otro caso, en el que la salud de los bebés está en riesgo, volvería a denunciarlo.
“Este premio también resarce un poco todo el deterioro y el sometimiento que las autoridades de nuestro país, en el área de salud, realizaron a través de esta lucha”, dijo Flamenco.
Añadió que “un profesional que se opone a la dinámica normal de la política de salud, en nuestro medio, es víctima de algún grado de represión profesional”.
El neonatólogo manifestó que miembros de la academia Americana de Pediatría y de otros países consideran el caso salvadoreño como emblemático y de insignia porque demuestra que es posible cambiar situaciones incorrectas a través de mecanismos legales.