La cantante Katy Perry fue la encargada de cerrar la última noche del “Rock in Río” edición 2015. Y tal parece que lo hizo sufriendo un incomodo momento.
Durante una parte del show, la artista estadounidense invitó a una fan a subir al escenario. La chica, llamada Rayane, no paró de besarla en el cuello y hasta tocó el trasero de la artista.
La joven, aparentemente ebria y bastante emocionada, acariciaba a la cantante, mientras ella trataba de superar el momento incómodo frente a los miles de asistentes.