La laguna de Olomega, en el departamento de La Unión, es testigo mudo de cómo la sequía ha dañado gran parte de la belleza natural y su biodiversidad.
Sus pobladores afirman que el nivel del agua ha retrocedido alrededor de 40 metros, dejando una gran parte del suelo seco y provocando pérdidas en la economía de los pobladores de la zona.
En la foto, dos personas se transportan desde el cantón Olomega al municipio de Tierra Blanca, en el departamento de Usulután.