Este día fue enviado a prisión al pastor Juan Adolfo V., de 51 años y su esposa María Antonia R. de V. quienes prostituían a su hija, una menor de trece años.
El Juzgado de Paz del municipio de Aguilares condenó a los acusados por los delitos de Violación agravada y Trata de personas, respectivamente.
Según las investigaciones, el pastor violaba a su propia hija y permitió que en febrero de 2013 fuera llevada por la madre a San Marcos Ocotepeque, Honduras, donde la prostituyeron con varios clientes.
A su regreso al país, la menor contó a un familiar lo sucedido y los maltratos a los abusos a los que era sometida hasta que sus progenitores fueron detenidos.