PANAMÁ. El Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Panamá y México entrará en vigor el 1 de julio próximo y supone la entrada a un mercado de más de 112 millones de habitantes de “alto poder adquisitivo”.
El pacto comercial, de 21 capítulos, recoge unos 4,000 aranceles. La Oficina de Negociaciones Comerciales Internacionales del Ministerio de Comercio e Industrias de Panamá (MICI), afirmó que el acuerdo abre la puerta a un mercado “36 veces más grande que el panameño”.
México es un consumidor importante de maíz, ají, frijoles, calabazas, aguacates, cacao, entre otros productos, lo que asegura, según el Ministerio de Comercio, un mercado importante para la colocación de productos panameños.
También hay productos con niveles importantes de exportación, como aceite de palma y medicamentos de productos mezclados o sin mezclar, preparados para usos terapéuticos. Además, despojos comestibles de animales de la especie bovina frescos o refrigerados y carnes de pescados congelados.
Por otro lado, unas 20 trasnacionales mexicanas han establecido operaciones en Panamá para participar en varios sectores productivos que van desde las finanzas; industria de la construcción, cemento y metales; panificadoras y restaurantes hasta telecomunicaciones. —EFE