Excelentísimo señor presidente profesor Salvador Sánchez Cerén:
Después del primer año de su gestión como presidente, los salvadoreños estamos reflexionando sobre el rumbo que lleva nuestro país. Aun cuando la mitad de la población votó por usted, parece que incluso esos salvadoreños concluyen que el país está en la peor situación en años, y en el rumbo equivocado. A pesar de su clara disposición al dialogo, los resultados no son buenos. No porque los voceros del FMLN y del gobierno repitan que todo está bien, va a cambiar lo evidente para todos, y es que hay más violencia, la economía sigue moribunda y la esperanza en un futuro mejor se apaga. Esto no es campaña política, si no el sentir de millones de salvadoreños, respaldado por estadísticas del gobierno.
Señor presidente, con todo respeto, le digo que usted tiene que tomar el liderazgo del país y cambiar el rumbo que llevamos. Todos los salvadoreños queremos que su gestión sea exitosa, tanto los de derecha como los de izquierda. Me refiero a los que no estamos en las extremas, y los que creemos que todos los salvadoreños, ricos y pobres, jóvenes y ancianos, mujeres y hombres, merecemos un mejor futuro. Usted tiene la oportunidad de hacer lo correcto en los próximos 4 años y dejar un mejor país al final de su gestión.
Para esto señor presidente, se necesita humildad y valentía en reconocer la crisis en que estamos. Difícilmente se resuelve un problema, sin primero reconocer que existe. Esto implica evaluar objetivamente si se tiene un plan claro de lo que el país necesita. Sin un plan, cualquier camino que se tome pudiera parecer el correcto. En materia de planeación, y sobre todo EJECUCIÓN, la mejor práctica dicta que dentro de un plan hay que establecer metas SMART (“inteligentes” del acrónimo en inglés).
Estas metas inteligentes tienen las siguientes características: son cortas, medibles, alcanzables, realistas y basadas en un periodo de tiempo. ¿Son los múltiples planes de seguridad ejecutables y tienen metas inteligentes? Desafortunadamente tenemos a muchos ministerios y autónomas, en donde en el mejor de los casos, hay planes que tienen poca probabilidad de tener un impacto positivo, y en el peor de los casos, no hay plan.
Le pido que evalúe fríamente si el equipo de su gobierno es el idóneo para la titánica labor que tienen por delante. Es claro que su primera opción fue llenar posiciones con miembros del FMLN, gobierno anterior y demás grupos que apoyaron su campaña. Sin embargo, ya pasó un año, y usted debe evaluar si se han ganado la “renovación de contrato”. Hizo lo políticamente correcto con su base y les dio la oportunidad, pero esto no puede ser un cheque en blanco para una pésima gestión de cinco años.
Como todo buen líder, tampoco puede aceptar soluciones temporales que causen un daño mayor a nuestro país en el mediano y largo plazo, como lo fue la nefasta tregua con las pandillas. Usted tiene la potestad de hacer un llamado a los salvadoreños que considere idóneos para su gabinete, independientemente de su preferencia política. Recuerde que es el presidente de TODOS los salvadoreños, y ninguno de los que creemos en la igualdad y hermandad que debe existir en nuestro país, vería mal que usted se rodee de funcionarios capaces, que provengan de todo el espectro de la sociedad.
Lo más seguro es que esto implique que no hayan muchos políticos en su gabinete, lo cual sería un fresco comienzo para su segundo año de gestión. Sabemos que hacer este análisis y tomar acciones no será fácil, pero los salvadoreños le pedimos #CambiodeRumbo.
*Colaborador de El Diario de Hoy. @luis_portillo