Un japonés tiró las cenizas de su mujer, de 64 años, en un inodoro de un supermercado en Tokio, publican medios internacionales.
El Hombre, de 68 años, alegó ante las autoridades de la localidad que la mujer le había hecho la vida “muy difícil”.
Según la información del periódico Yomiuri Shimbun, la investigación del caso se inició desde que encontraron restos de huesos, entre ellos un mentón, en el inodoro. El Hombre se entregó a la Policía.
“A lo largo de los años la relación se fue deteriorando mucho. Mi odio hacia ella era mayor. La vida era muy difícil antes de sus fallecimiento”, agregó el detenido.
El hombre enfrentará la ley por abandono de restos mortales, dijo la Fiscalía japonesa.