Llegamos, finalmente, al resultado del horroroso escabroso escrutinio recién pasado, donde, a la postre, el partido comunista FMLN quedará significativamente detrás del partido conservador ARENA. Los votos en doce departamentos de diputados electos de ARENA, reflejan aplastante mayoría sobre los electos del FMLN, indicando cómo los salvadoreños rechazan el comunismo del Siglo XXI.
GANA, de seguir de rémora del FMLN, debe advertir cómo el pueblo lo está castigando rechazando el transfuguismo.
En estas elecciones la ciudadanía salvadoreña demostró un aguante nunca antes percibido, ante tantos abusos autocráticos y desatinos de un TSE presidido por un prepotente presidente, que descaradamente transgredió leyes haciendo un chapandongo del Estado de Derecho, y según abogados tanques del pensamiento salvadoreño, como doctores René Fortín Magaña, Enrique Borgo, Abraham Rodríguez, Alfredo Martínez Moreno, Carlos Quintanilla Schmidt, René Hernández Valiente, y otros grandes más, acusan al Supremo Tribunal de violar varias disposiciones del Código Electoral.
Nuestro Código Electoral debe ser cambiado obligadamente, pues los magistrados del ente colegiado, no deben ser militantes partidistas, para que honrada y verdaderamente actúen en concordancia respetando, cumpliendo y defendiendo la voluntad popular y no como declaró descaradamente este presidente del organismo, de cumplir órdenes de su partido FMLN. Creo que dos excelentes posibilidades para magistrados del TSE, podrían ser Félix Ulloa y Juan Pablo Durán.
Ciertamente aquí, el único poder gubernamental enfocado al beneficio ciudadano ha sido la Sala de lo Constitucional, exactamente por no plegarse ante las exigencias de los partidos.
Entre sus atinados legales, destaco algunos. Se legalizó el voto por cara. Hoy, implementó el voto cruzado, dándonos derecho a votar por quienes más nos gusten –de diferentes partidos o del mismo– para gobernarnos. Esto jamás se habría logrado si no hubiese sido impuesto ahora, pues el FMLN se oponía fieramente, dado su régimen autoritario de tener a su militancia sometida a sus lineamientos esclavizadores comunistas. Otra admirable ley fue contra los tránsfugas. Muchos habrán aprendido su lección al ver lo sucedido a los últimos vendidos.
Extinguiéndose la esperanzada asistencia a la marcha “vida, paz, justicia”, (pura propaganda gubernamental) de varios millones de salvadoreños anunciados, fomentaba odio en pancartas con fotos de conocidos miembros de ARENA –¿paz?, ¿cuál paz?– e increíble, la presencia en ésta del padre Toño, que aceptó sus delitos aquí, siendo expulsado del país.
Por otro lado, fue programada para fecha coincidente con las celebraciones del tiránico gobierno opresor venezolano, (fecha obviamente conocida por este gobierno y que, evidentemente ignorándolo organizadores no comunistas, fueron “agarrados en curva”, costando además verdadera fortuna a nuestro necesitado país)-. Recibí fotos de carteles diciendo: “Venezuela somos esperanza”, apoyando indudablemente a Venezuela-Maduro. Esto fue sumamente insensato, porque el gobierno americano no está conformado por mensos y hacerla ese día, organizada principalmente por este gobierno que ha expresado múltiples veces que Venezuela-chavista-SigloXXI es su faro de luz, es bofetada al Presidente Obama en momentos que Maduro vocifera contra él, cuando Obama, generosamente, ha extendido su mano benefactora a nuestra patria con el Fondo del Milenio. Igual cachetada ha sido proferida a tanto salvadoreño que vive en USA, y aman a ese país como su segunda patria, siendo quienes fundamentalmente mantienen económicamente a flote a El Salvador con sus millonarias remesas.
Horroroso escándalo del militante efemelenista pastor Carlos Rivas, también en la marcha, que violentara con lujo de machismo a una mujer y encima señalara arrogante que, “quien esté libre de pecado que ‘le’ tire la primera piedra”, adjudicándose el papel de Jesucristo, absolviéndose él mismo altivamente.
*Columnista de El Diario de Hoy.