Capturan a testaferro de vicepresidente argentino

Es ligado a un caso de corrupción del argentino Amado Boudou

descripción de la imagen
elsalvador.com

Por

2015-02-21 8:00:00

MENDOZA. A pedido de la justicia uruguaya la policía argentina detuvo a Alejandro Vandenbroele, uno de los procesados en la causa contra el vicepresidente argentino Amado Boudou, confirmaron fuentes oficiales.

Vandenbroele fue detenido el viernes por la noche en la provincia de Mendoza por policías de Seguridad Aeroportuaria luego de que dejara a su hija en casa de su exesposa, informó la página oficial de noticias judiciales argentinas Infojus Noticias.

La justicia argentina deberá determinar ahora si extradita a Vandenbroele.

El juez uruguayo Nestor Valetti había solicitado la captura internacional y la extradición de Vandenbroele porque no se presentó en dos ocasiones a testificar en el país ante el Juzgado Especializado en Crimen Organizado en un caso sobre presunto lavado de dinero relacionado con la empresa The Old Fund, vinculada a la imprenta Ciccone.

Vandenbroele había argumentado en una ocasión que la justicia argentina le había impedido salir del país por su implicación en la causa que involucra al vicepresidente Boudou en relación a la imprenta.

“Eligió ser un ladrón”

Por su parte, la exesposa de Vandenbroele, Laura Muñoz, afirmó, tras la detención de su excónyugue en Mendoza, que él “eligió ser un ladrón, una persona sin dignidad”.

De acuerdo con el diario argentino Clarín, Muñoz asegura que Alejandro Vandenbroele “es una persona que niega la verdad” pero “las pruebas son muy contundentes”. Luego agregó: “Ahora no tengo miedo. La situación mía y la del país cambió mucho”.

Muñoz describe a su exesposo como un hombre que “se transformó en una persona altanera y altiva, que te trata de hacer entender las cosas por la violencia”.

La Cámara Federal Argentina confirmó esta semana el procesamiento sin prisión preventiva de Boudou y Vandenbroele, entre otros, por el caso de Ciccone, donde se acusa al vicepresidente argentino de sobornos y negociaciones incompatibles con un cargo público, aunque no fijó fecha todavía para el juicio oral.

Boudou fue procesado en julio por la adquisición a través de terceros de 70 % de Ciccone Calcográfica, que luego fue contratada por el Estado para la impresión de billetes.

De acuerdo con la investigación, los propietarios de Ciccone buscaron la ayuda de Boudou tras decretarse la quiebra de la empresa a mediados de 2010. En ese entonces ministro de Economía del primer gobierno de Fernández, Boudou tomó el control accionario de la empresa mediante testaferros, una maniobra que para la justicia se trata de delito de cohecho.

Boudou también habría incurrido en el delito de negociaciones incompatibles con la función pública cuando, ya teniendo el control accionario de la empresa, intervino para que el ente recaudador de impuestos le facilitara a Ciccone un plan de pagos muy conveniente para sanear su deuda fiscal. —AGENCIAS.