El jueves 2 de octubre, se trató en la Asamblea el tema de la legalización del aborto, obteniéndose únicamente 30 votos en contra de este crimen. Entre éstos están la bancada de ARENA, 28, más dos honestos diputados (no conocemos nombres) de dos pequeños partidos.
Los diputados efemelenistas en pleno, los de su satélite GANA y la mayoría del resto de partidos menores, votaron para condenar a muerte a los niños salvadoreños no nacidos. Así está la situación moral de nuestros gobernantes.
Entonces, si queremos un mejor país con políticos que defiendan los valores propios de nuestra ciudadanía, morales, culturales y cristianos (como no matar), debemos sopesar nuestra decisión y no votar por gente sin conciencia, corazón, ni moral, actualmente mayoría en la Asamblea.
La voz consonante para asesinar a inocentes bebés salvadoreños la llevó el presidente del Congreso Sigfrido Reyes, quien en su egolatría y en total “delirium tremens” por su apellido Rey…es, se lo creyó totalmente, autoerigiéndose rey “real” con todos los poderes, pasando encima de nuestra Constitución y de la Sala Constitucional, cuyos magistrados –ahora no cuatro sino cinco fantásticos–, son personas íntegras que trabajan absolutamente en beneficio de la ciudadanía salvadoreña.
Lo que no advirtió Rey…”es” que al exigir el aborto, lo que le ha sucedido verdaderamente, es que desde el infierno ha sido reencarnado por el más sanguinario rey que jamás existió, Herodes, que sentenció a muerte a todos los niños de su reino en persecución de Jesús para acabárselo…… igualito lo hace ahora “frido”, al urdir el asesinato de nuestros bebés y acabarse a Jesús y nuestros valores morales por Dios ordenados: “No matar”.
Indudablemente le vale lo que le ha pasado al presidente Rajoy en España, donde el pueblo español entero, en recientes encuestas, con furia lo hizo bajar 30 puntos respecto al voto, por apoyar el aborto. Se ve que aunque “avant guard”, como cree don Sigfrido que son los países con leyes pro-muerte, las poblaciones enteras rechazan a verdugos asesinos políticos.
Ahora analicemos esta bomba:
Recientemente tuvimos a la prepotente injerencista Amnistía Internacional, apéndice solapado de la ONU, demandando legalizar el aborto y desprestigiando internacionalmente a nuestra Patria con sarta de salvajes mentiras, por defender la vida. El hindú Salil Shetty es el director de Amnistía desde 2010, y él, personalmente, se presentó aquí para exigirlo. Shetty, también, desde 2003 a 2010, fue director de la campaña ONU para lineamientos “Fondo del Milenio”.
Sabemos que el Gobierno Obama ha presionado al mundo entero para legalizar el aborto y el matrimonio gay. (Métodos de control poblacional). Curiosamente, ahora, al mismo tiempo que llega Amnistía Internacional con este director de ONU/Amnistía Internacional, repentinamente USA quita obstáculos dando paso al Fondo del Milenio para beneficiarnos al desarrollo de nuestras playas. Entre lo bueno, meten la atrocidad. ¿Se ha vendido así la vida de nuestros bebés?¡Horror!
Pero para rematarnos, surge “grandiosa idea” presionada también por ONU para diezmarnos más, en otra ingeniosa treta: Llevar médicos salvadoreños al África, pagados por ONU, a curar enfermos del ébola. Vale solidarizarnos con África, pero lejos, porque ni siquiera España, país primermundista de grandes avances médicos, pudo controlar allí el contagio. Esto sucedió a dos enfermeras de misionero fallecido, infectándose al cuidarlo.
¡Por Dios! ¡Despertemos alzando la voz ante tanta monstruosidad!
* Columnista de El Diario de Hoy.