Luego que un tramo de la internacional CA-4, en la comunidad El Portillo, Sinuapa, en el occidente de Honduras, se desplomara por las fuertes lluvias el lunes pasado, el tráfico de mercadería entre El Salvador, Guatemala y Honduras enfrenta serias dificultades para llegar a su destino.
Decenas de transportistas salvadoreños y del vecino país ya utilizan Anguiatú como vía alternativa para entregar sus productos en ambos países.
Según lo declaró el presidente de la Asociación Salvadoreña de Transportistas Internacionales de Carga (Astic), Raúl Alfaro, desde el lunes cuando parte de la carretera de Ocotepeque se desbordo, los camiones quedaron barados con la mercancía que llevaban y aunque el miércoles varios motoristas se atrevieron a pasar bajo su propio riesgo, ayer se les impidió continuar circulando para poder realizar las labores de remoción.