Una denuncia del apoderado legal de la empresa alemana en noviembre de 2009 motivó la investigación que culminó con un allanamiento, realizado el 25 de marzo del año 2010, al puesto comercial del imputado, William Alfredo Domínguez Barahona, ubicado en el Mercado Central, de San Salvador.
En esa ocasión las autoridades recolectaron varias cajas que contenían medicamentos Neurobión y Doloneurobión, activador neurocerebral, Campolón y, supuestamente, facturas de pago a nombre del acusado, según la investigación.
Se detalla que la mercadería fue sometida a peritaje grafo- técnico y se determinó que el formato impreso de las cajas de cartón de los medicamentos no fue elaborada por la empresa “Merck”.
Algunas muestras también fueron sometidas a análisis microbiológicos y fisicoquímicos y mostraron contaminación. El Neurobión de 50 ml que el imputado tenía a la venta poseía pseudomona y E. Coli y no poseía las vitaminas declaradas (B1, B6, y B12).
Los medicamentos que el imputado comercializaba no cumplían con los requerimientos de calidad por no contener la cantidad que el rótulo informaba y por estar contaminados.