La Universidad Don Bosco, al cumplirse el bicentenario del nacimiento de San Juan Bosco, ha organizado el primer Congreso Internacional de Educación y Espiritualidad Salesiana 2014.
El evento se desarrolla en las instalaciones del campus universitario, en la ciudad de Soyapango, y finalizará mañana.
El congreso tiene la finalidad de estudiar y profundizar los aspectos fundamentales del carisma de San Juan Bosco.
Una de las principales preocupaciones de Bosco, eran los jóvenes y su educación.
En el congreso se han desarrollado diferentes conferencias magistrales que revisten mucha importancia en el ámbito económico, político, social y educativo.
Durante las jornadas de participación se han instalado mesas de trabajo enfocadas en el Sistema Preventivo Salesiano, a partir de tres grandes ejes : realidad, pedagogía y espiritualidad.
Ponentes internacionales
En el evento se han organizado diferentes ponencias con la participación de expertos nacionales e internacionales.
Todos ellos especializados en educación, psicopedagogía, economía y otras áreas de formación.
Entre ellos destacan los sacerdotes Alejandro León y Rubén Darío Jaramillo, del Centro Regional de Formación Salesiana de Quito, Ecuador.
Además, el sacerdote Juan Alcides Cárdenas Tapia, director de la Unidad Educativa Cardenal Spellman Cumbayá, siempre de Ecuador.
Asimismo, participarán Helga Cuéllar Marchelli, directora del Departamento de Estudios Sociales de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social de El Salvador (Fusades); William Pleitez, economista y jefe del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y Carlos Guillermo Ramos, director de la Facultad de Ciencias Sociales de El Salvador (Flacso).
El presbítero Óscar Rodríguez, vicepresidente del consejo directivo de la Universidad Don Bosco, durante el acto de inauguración, citó al obispo salesiano Enrico del Covolo, rector de la Pontificia Universidad Lateranense : “El mundo que hemos preparado para las nuevas generaciones destroza su derecho a la felicidad… Creo que si Don Bosco todavía estuviera entre nosotros, nos diría : Es tiempo de recetas, diagnósticos tenemos bastantes”.