Aunque al salir la cosecha 2014-2015, los productores de maíz tenían la esperanza de que el sector podía obtener ganancias de hasta $169 millones con la venta del grano, la realidad a la que se enfrentan es totalmente diferente. Debido a las condiciones climáticas que arruinaron el fruto de su esfuerzo y la falta de medidas serias por parte de las autoridades -como ellos señalan-, no les quedará ni las ganancias que estimaron, ni su inversión, ni mucho menos su cosecha.
Así mientras el ministro de Agricultura y Ganadería ha señalado que las pérdidas que se han tenido a causa de la sequía rondan los 4 millones de quintales en maíz blanco a nivel nacional, las cifras que presentaron los miembros de la Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (Campo), indican que estas duplican la estimación que ha realizado la cartera de Estado.
Según lo apuntó el presidente de Campo, Guillermo Quijano, en maíz ya se contabilizan 9 millones de quintales totalmente deteriorados y $82.2 millones perdidos en inversión que realizaron los agricultores de todo el país.
Tal como lo apuntaron los representantes de esta gremial, el Ministerio de Agricultura no se está sincerando con los datos. “Nuestra información en algún momento ha sido mal vista por las autoridades de agricultura porque dicen que las cifras oficiales ellos las manejan, pero hay una actitud de minimizar las pérdidas, porque por un lado se plantea que el rendimiento nacional por manzana es de 50.2 quintales -ese es el dato oficial que dieron el año pasado y es el dato oficial con que hicieron las proyecciones para este año-, pero para contabilizar pérdidas utilizan un promedio de 35 quintales por manzana. Al final, si manejan esta cantidad por manzana las pérdidas se reducen”, criticó Quijano.
Datos presentados por la gremial indican que si la cosecha no hubiera enfrentado los problemas que se quisieron ocultar, las 165 mil manzanas que se vieron severamente afectadas hubieran permitido que la producción del grano se mantuviera en 20 millones.
Sin embargo, tal como lo muestra el mapa de la producción afectada en cada departamento, el país tendrá en consecuencia menos producto para ofrecer al consumidor.
“Dicen que nosotros no tenemos el equipo técnico para andar dando datos, pero si tenemos líderes serios que nos brindan información responsable. Esto se trata del hambre del pueblo”, reclamó Ricardo Sánchez, también agremiado a Campo.
Las cifras que han recopilado los agremiados a esta gremial indican además que la zona mayormente afectada ha sido la oriental, en la cual se ha perdido casi el 100 % de la producción.
Prevén más efectos negativos
Los más de 30 días consecutivos sin lluvias -y más en Oriente- y la falta de seriedad por parte de las autoridades, según lo indican los productores, además de dejar la pérdida de inversión, ha dejado a los productores sin ánimo de resembrar y sin condiciones -económicas- para quienes aún se animan a intentarlo.
Según lo apuntaron los representantes de Campo, el MAG ha cometido el error de entregar paquetes agrícolas este año a través de los gobernadores de cada departamento y esto ha causado que varios productores se queden fuera de la entrega.
“Las consecuencias se van a ver en la próxima cosecha”, advierten los agremiados a Campo, ya que según lo manifiestan, se han entregado los paquetes incluso en lugares donde ya no se siembra y que los beneficiados los han estado vendiendo.
El efecto negativo vendrá cuando la producción sea insuficiente y los precios se eleven aún más, advierten.
Los representantes de Campo destacaron, que para quienes el paquete agrícola ha llegado a sus manos, su contenido no es suficiente y que deberán ver cómo financian lo que les falta para poder sembrar. “El productor va a continuar subsidiándole la comida a la gente porque debe invertir para poder producir y cuando sale el producto, le cae la Defensoría para que no le suba precio”, resintió Quijano.
Los productores lamentan que con todas las condiciones difíciles, el gobierno se limite a entregar paquetes sin herramientas ni asesoría y que además espere que el producto salga barato.
Quijano señaló que si el MAG no toma medidas contundentes tomando en cuenta las condiciones climáticas “la cosecha 2015 puede estar en peligro”.