Denuncian escasez de medicinas

Paciente invirtió casi $900 en la compra de antibióticos que se agotaron en el hospital Zacamil

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Un usuario muestra una de las recetas no despachadas en el Zacamil. Foto EDH

Por Yamileth Cáceres nacional@eldiariodehoy.com

2014-06-13 8:00:00

La familia de Rosa Granados tuvo que rebuscarse con casi $900 para comprar diez frascos de Tienam, un antibiótico de alta potencia, porque en el hospital Zacamil no tenían.

Rosa fue operada de la tibia y el fémur a finales de abril en el hospital Zacamil, pero se le infectó. El 15 de mayo fue ingresada nuevamente para tratarla, pero el fármaco que necesitaba se había agotado.

El jueves compraron otro antibiótico, que se lo recetaron por siete días, comentó Granados, de 52 años.

“No sé como ha hecho mi pobre hija porque yo estoy sin trabajar, prácticamente ella no tiene trabajo y depende del esposo, no sé cómo han hecho para comprarme el medicamento”, dijo

En los primeros días tampoco le suministraron Tramal, un analgésico de uso hospitalario y frecuente en los servicios de cirugía.

Acostada en su camilla, la señora manifestó que falta apoyo del gobierno central para las personas de escasos recursos. “Uno necesita estar en estos centros porque uno es pobre y no puede pagar un hospital privado”, expuso.

Enfermeras del Servicio de Cirugía Mujeres aseguraron que carecen de algunos antibióticos y sedantes, entre ellos Ciprofloxacina, Tienam, Tramal, Midazolam, Diazepam y Pavulón.

Una enfermera comentó que un día ingresa un producto, pero se agotan otros.

“Cuando no hay, no se les cumple. En este hospital hay dos analgésicos que son los más indicados, entonces solo se les cumple uno porque no hay del otro. El paciente tiene que estar con dolor porque no hay”, comentó una enfermera, que prefirió el anonimato.

En la farmacia es común encontrarse a los usuarios que se van solo con las recetas, uno de ellos es Roberto Hernández, él llegó a traer Ácido Acetilsalicílico e Irbesartán para su madre.

Pero en la ventanilla de la farmacia le dijeron que no había, “mi mamá está en tratamiento y todas estas cosas dicen ellos que no hay y siempre que vengo no hay; las recetas se van acumulando”, expresó Hernández.

Luz Esquivel fue otra usuaria del Zacamil que ayer hacía fila para que le despacharan los fármacos prescritos, pero solo recibió uno de ellos.

“Tengo que comprar la Irbesartán y la Aspirinita. El Irbesartán es caro, vale casi $40”, añadió la señora.

El medicamento es para tratar problemas del corazón e indicó que la aspirinita no se la entregan desde hace cuatro meses, aproximadamente.

Ella tendrá que comprar, ambos productos, en la farmacia la solución que le dieron fue que estuviera llamando.

“La economía afecta, por eso viene uno al hospital, si tuviera para pagarlas fuera a pasar consulta fuera, pero vengo al hospital porque no soy pensionada”, explicó Esquivel.

Por su parte, María Isabel Rivera ha acumulado tres recetas de lágrimas naturales y otra de uso oftalmológico. “Se me nubla la vista porque soy diabética, por eso me dan dos medicinas para los ojos, pero no hay. Ya tienen días de no darme, he venido como cuatro veces”.

Rosario Reyes, del Sindicato General de Empleados de Salud (Sigesal,) expresó que el director, Jesús Portillo, se comprometió a comprar los fármacos, pero el problema persiste.

Portillo dijo que el jueves entró “una gran cantidad de medicamentos” y que los que quedan pendientes son muy pocos. No obstante, manifestó no tener el detalle del número que productos que ingresaron.

Entre el 12 y 18 de mayo, en el Zacamil carecían del 24.8 por ciento de los productos, en concreto faltaban 63.

Sigesal protestó ayer también porque aseguran que el director no cumplió los acuerdos de rotar a cuatro jefaturas y tampoco apoya las resoluciones contra un trabajador acusado de acoso sexual.

Ante esto, Portillo declaró que está pendiente del estudio de cómo harán la rotación del personal y con el otro caso, esperará la resolución de los tribunales.