Canciller Hugo Martínez: No vamos a alinearnos a ningún grupo de países

La política exterior del nuevo gobierno estará marcada por el pragmatismo, sin ataduras ideológicas; se potenciará el comercio exterior y la inversión; se buscará acercamiento de consulados con la diáspora, además de alianzas con nuevos países y, también, se ordenará la cooperación internacional. Son los ejes que define el Ministro de Relaciones Exteriores

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El canciller Hugo Martínez, junto a otros funcionarios del país, se reunió con los representantes de  Bielorrusia 

/ Foto Por Archivo

Por Enrique Miranda nacional@eldiariodehoy.com

2014-06-02 9:00:00

El Canciller Hugo Martínez estrenó su cargo con una apuesta fuerte en materia de relaciones exteriores: la petición de ingreso del país a Petrocaribe, la alianza liderada por Venezuela para vender combustibles con programas especiales de pago, pero ante cualquier resquemor que pueda causar esa acción, el ministro de Relaciones Exteriores busca desmitificar a Petrocaribe al decir que es nada más un modo de cooperación que permite a los países administrar su factura petrolera de forma que pueda además activar programas sociales.

Es más, cuando se le pregunta por el significado de ese ingreso se adelanta en recordar que el país pertenece a la Asocio para el Crecimiento, un programa emblema de los Estados Unidos y también que el país ya es miembro observador de la Alianza del Pacífico, un bloque comercial integrado por países con gobiernos conservadores como Colombia, México o Perú y democracias consolidadas como Chile.

Asegura que la política exterior del país será “sin ataduras ideológicas”, que a veces se coincidirá en votaciones en organismos multilaterales con el Norte o a veces con el Sur. El país no se casará con ningún bloque asegura, sino que la relación será pragmática, se solidificará con socios estratégicos como Estados Unidos pero también se mantendrán lazos con países como Venezuela y se buscará alianzas con otros países, sobre todo con Centroamérica.

Habla además que durante su gestión se tendrá una apuesta decidida por el incentivo del comercio exterior y la inversión y que buscará acrecentar y ordenar la cooperación internacional.

Un capítulo especial merece su intención de mejorar la atención en los consulados y tecnificar los procesos para que los compatriotas en el exterior se sientan más identificados con las oficinas consulares. Además continuará con la profesionalización del servicio exterior y hará rotaciones en las diferentes embajadas. Acá lo que conversó con El Diario de Hoy.

¿Qué significa tener una política exterior sin ideologías?

La política exterior abierta al mundo sin ataduras ni ideologías es algo que planteé desde mi primera gestión. Lo que significa es que lo que guía, lo que orienta a nuestra política exterior es el interés supremo del Estado salvadoreño y por lo tanto el interés de los salvadoreños y salvadoreñas. No buscamos alineamientos con grupos de países en particular por razones ideológicas, sino más bien buscamos alineamientos con grupos de países por espacios geográficos naturales y por organismos institucionales del multilateralismo. Espacios geográficos naturales, el más natural de todos es el Sistema de la Integración Centroamericana. Y también vamos creciendo en esos espacios hacia la Organización de Estados Americanos (OEA), a Celac, a Naciones Unidas, y luego a agrupamientos regionales y subregionales de acuerdo a los intereses del país.

Vimos que en la reciente discusión en el Senado de Estados Unidos sobre las posibles sanciones a Venezuela, el país era claramente identificado por senadores como aliados del bloque chavista tomando en cuenta que han votado juntos por ejemplo en la OEA. ¿Seguirá esto igual?

No. El Salvador tiene una posición independiente. Queremos buenas relaciones con todo mundo: queremos buenas relaciones con el Norte, queremos buenas relaciones con el Sur. Algunas veces coincidiremos con el Norte otras veces coincidiremos con el Sur. Y de eso se trata una política exterior abierta al mundo y sin ataduras ideológicas. Desde que realizamos la primera gestión y ahora mismo que vamos a la siguiente gestión. La posición de El Salvador no tiene que ser necesariamente predecible ‘El Salvador ya está alineado con este bloque o El Salvador está alineado con este otro bloque’. Nuestras posiciones van a ser en base a los intereses del país y en base a valores y principios fundamentales que son compartidos en todo el mundo: la paz, la democracia, el principio de la autodeterminación, eso será el rumbo, la pauta orientadora que tendrá nuestra política exterior.

No veremos al país etiquetado de ser de este bloque…

Siempre habrá personas que sacarán sus propias interpretaciones o que harán sus propias afirmaciones pero El Salvador tiene una política abierta al mundo y está trabajando con todos los países que es conveniente trabajar. En esa lógica tenemos los socios históricos y estratégicos y trabajamos con ellos por fortalecer esa relación. Tenemos países con los cuales hay relaciones emergentes que se deben profundizar esas relaciones. El mundo es demasiado interdependiente, demasiado globalizado como para estar alineados únicamente con un grupo de países. Lo fundamental es la relación con todos los países del mundo respetando el principio de soberanía y autodeterminación y buscando las coincidencias y como la cooperación, las buenas relaciones benefician a países como El Salvador.

En ejemplos prácticos, el país entra hoy a Petrocaribe…

Sí y somos miembros del Asocio para el Crecimiento, y somos miembros observadores de la Alianza del Pacífico. Doy ejemplos prácticos del abanico de relaciones que tenemos.

Ok, pero acá Petrocaribe se concibe como contrapuesto a Estados Unidos, siendo que el país mantiene buenas relaciones con Estados Unidos, casi se anticipó a contestarme, pero, ¿se pueden conciliar esas relaciones?

Hay mucho preconcepto sobre eso, sobre las relaciones internacionales y sobre ciertos agrupamientos que tienen un carácter no solamente económico sino de una relación histórica. Por ejemplo, mucha gente no recuerda que Petrocaribe tiene sus orígenes en el Pacto de San José, el pacto que firmó Venezuela, México y los países de Centroamérica para dar precios preferenciales. Y eso es Petrocaribe: un trato preferencial a los países de Centroamérica y el Caribe en materia energética para atenuar las asimetrías que puedan existir en materia energética y que además atenuando esas asimetrías puedan ocupar algunos recursos para programas sociales.

Esto incluso lo hemos conversado con funcionarios de nuestros países amigos, nuestros países socios y no hay ningún problema y lo que sí estamos convencidos es que todas nuestras relaciones con grupos de países deben ser transparentes.

Precisamente, hablando de transparencia el Secretario General del FMLN, Medardo González, dijo el domingo que unirse a Petrocaribe no afecta a Fomilenio II, pero que Estados Unidos les ha pedido transparencia en Petrocaribe. ¿Cómo se logra?

Los documentos constitutivos de Petrocaribe son públicos, la carta de solicitud de adhesión será pública, los acuerdos a los que lleguemos serán públicos. No hay nada de qué temer ni ocultar en este proceso. Como dije, hay mucho preconcepto y normalmente se tiende a ver solo un lado de las cosas. Incluso hay gente que dice: ‘¿por qué El Salvador está ingresando a Petrocaribe y no a la Alianza del Pacífico?’ Y hay falta de información porque incluso en los últimos días que estuve de canciller en el periodo anterior ya habíamos hecho la solicitud y ya fuimos aceptados como miembros observadores.

Hay dudas porque la gente dice que la deuda con Venezuela va a ser soberana. ¿Qué implica esto, canciller?

Hay que tener claridad que el trato preferencial no es una deuda que se pueda pagar en el largo plazo toda. Entre el 50, 60 y hasta el 70% se tiene que pagar de inmediato la factura petrolera. El beneficio es el otro porcentaje que le permite a los estados administrar de mejor manera la factura energética y eso es lo que estamos haciendo.