En el video, aparece el alcalde de la ciudad de Amstelveen, Fred de Graaf, aparentemente tocando las nalgas de la monarca en presencia del propio rey, y en éste se puede escuchar a un hombre gritando: “¡Está tocando su trasero!”.
Sin embargo, el alcalde rechazó las acusaciones y aseguró que probablemente todo se deba a un efecto óptimo provocado por el ángulo desde el que se tomaba el video: “No me acuerdo y de ninguna manera lo hubiera hecho de forma consciente. Sé muy bien que esto no está bien”, aseguró De Graaf en la televisión holandesa. “Pudo haber habido una distancia de un centímetro entre nosotros”, aseguró
Un periodista estadounidense había grabado el video durante la visita oficial de la Familia Real a la ciudad de Amstelveen, próxima a Ámsterdam, y las había colgado en Youtube. Después, las imágenes se difundieron rapidísimamente por las redes sociales.