Párvulos aprenderán jugando y no se les enseñará a leer

Educación cambió los programas de Enseñanza Inicial y Parvularia a nivel nacional

descripción de la imagen
La maestra de Parvularia del Centro Escolar 22 de Junio, del turno de la mañana, ya empezó a trabajar con los nuevos programas de estudio, pero necesita insumos. Fotos EDH / Miguel Villalta

Por Susana Joma nacional@eldiariodehoy.com

2014-01-24 7:00:00

A partir de este año los profesores de centros educativos públicos y privados que atienden a niños de cuatro a seis años de edad aplicarán un nuevo programa y método de enseñanza. Esto, pese a que no les fue provisto por el Ministerio de Educación (Mined) por escrito y con la suficiente antelación para planificar bien sus clases.

Ahora la Parvularia está dividida en tres niveles: cuatro, cinco y seis años. Además, se elimina el uso de la palabra “kínder”.

Por lo menos cuatro maestras de escuelas públicas, consultadas al respecto, explicaron que a la luz de estos nuevos programas ahora tienen la indicación de desarrollar muchos juegos y otras actividades con los infantes dentro de la escuela. Además, los pequeños no llevarán tareas para hacer en la casa y tampoco es obligatorio que al terminar la Parvularia puedan leer y escribir como solía ocurrir.

Había casos en que los niños llevaban hasta cinco cuadernos con tareas. Eso se acabó. Otra de la novedades es que se les empezará a introducir al idioma inglés y los padres tendrán que participar en las actividades que organice el docente. Estas se realizarán dentro o fuera del aula, para enseñar al niño diferentes conocimientos vinculados con el Lenguaje, las Matemáticas, la Ciencia y el Arte.

Esto último es parte del concepto del aula abierta donde podrían trabajarse pequeños talleres, huertos, etcétera.

Sin embargo, entre las educadoras hay preocupación porque el Mined aún no ha mandado el presupuesto a los centros y, tal como está planteado el nuevo currículo, los centros necesitan más espacios y nuevos recursos lúdicos para atender a los pequeños.

El nuevo currículo de enseñanza fue desarrollado con la asesoría del Centro de Referencia Latinoamericano para la Educación Preescolar (Celep), por un equipo técnico del Mined, el Equipo Técnico de Diseño Curricular de la UCA y con el financiamiento de varias organizaciones internacionales.

Javier Hernández Amaya, presidente de la Asociación de Colegios Privados de El Salvador, expresó que en los últimos años los maestros de este nivel educativo han tenido que trabajar con, por lo menos, tres versiones de programas de estudio para Kínder y Parvularia.

Primero el que se aplicó con el Plan 2021. Luego una primera versión que lanzó este gobierno con su Plan Social Educativo y esta última que, según Hernández Amaya, no fue consultada con los colegios privados ni con las gremiales docentes.

Esos cambios constantes de programas implican, en opinión de Hernández, un desperdicio de fondos. Desde su punto de vista, se está introduciendo de forma “atropellada”, considerando que a los docentes de los colegios se les capacitó en ello del 5 al 11 de diciembre y a los del sector público entre el 8 y 14 de enero. Además, señala que no hay evidencia de que este nuevo currículo y programas de estudio hayan sido validados como asegura el Ministerio de Educación.

Además, el representante de la Asociación de Colegios Privados de El Salvador expresa que cuando se va a aplicar un cambio de programas, después de haber sido validados, estos pasan varios años en experimentación.

“Eso nos trae a cuenta que tenemos necesariamente que ver un posible margen de error, que darnos a nosotros la posibilidad de tener en 2015 otros programas de estudio en Educación Parvularia, al no haber estudiado como se debe los del 2014”, indicó.

Aunque Hernández ve con buenos ojos la introducción de la enseñanza del inglés desde los primeros años, sobre todo en la escuela pública, se pregunta si el Ministerio dotará a las escuelas de maestros de esa especialidad y de recursos para trabajar ese idioma con los niños.

Advierte que, si eso no ocurre, esto terminará a cargo de un maestro de otra especialidad y, a la larga, se tendrá estudiantes frustrados que cuando salgan de la escuela tendrán que luchar por aprender la forma correcta de pronunciar el inglés.

Rosa María Escobar Polanco, quien atiende la Parvularia de seis años en el Centro Escolar 22 de Junio, confirmó que recibieron una capacitación de cinco horas durante cinco días previo al inicio de clases. Por ello, solo ha podido planificar el primer periodo.

Escobar Polanco explica que en los primeros días que lleva aplicando el programa ha notado que los niños participan más en el aula.

“Siento que va más amplio (el programa), el niño se va desarrollando en distintas áreas”, comentó. Por otro lado, aclaró que esto demandará que los padres de familia participen más.

Escobar Polanco es la única maestra de la escuela que recibió la capacitación y, según comenta, no le entregaron copias impresas de los programas, como antes lo hacían. Los documentos se los dieron en un disco compacto, así que ellos tendrán que mandarlos a imprimir.

Según explica, reunirá a los padres de familia para explicarles la visión y la dinámica de los nuevos programas. Hará lo mismo con otras educadoras de la zona para ver los resultados que van teniendo en estos días.

Flor de María Fajardo, especialista en Educación Parvularia, detalló que en la primera infancia al niño hay que desarrollarle la psicomotricidad, la parte cognitiva, la parte de destrezas y habilidades, pero ya en la Parvularia entra lo que es el conocimiento.

Al niño se le prepara en un nuevo entorno donde va a socializar más con los niños y tiene que aprender a valerse por sí mismo. También se prepara en la parte del desarrollo lógico matemático y los principios de la lecto-escritura: enseñarle trazos, conceptos, ubicarlo en el espacio y el tiempo.

Noemí Rivas, docente de la Escuela de Educación Parvularia de Antiguo Cuscatlán, expresó que los nuevos programas son distintos a los anteriores. Hoy ya no desarrollarán los contenidos por trimestres ni unidades, sino por ejes. Además, se necesitará que los maestros preparen una carta didáctica amplia.

Rivas también considera que se les debió capacitar más. “¿Usted cree que sobre un programa de estudios se puede capacitar a un maestro con cinco jornadas de cinco horas? Nos han dado una pinceladita”, advierte.

Expone que las instrucciones que le han dado a todas las maestras de párvulos es que no se presione al niño para que aprenda a leer y escribir; aclaró que ellas nunca los han obligado, porque es contraproducente. “El niño va dando (resultados) gradualmente”, agregó.

En el centro escolar Cantón Mapilapa, la profesora Ruth de Urías, quien atiende la Parvularia, manifestó que ella reunió a los padres el miércoles para explicarles que el Ministerio de Educación hace énfasis en que en Preparatoria no se les debe enseñar a leer a los niños, porque no tienen todavía la capacidad intelectual.

De Urías afirma que la enseñanza lúdica no es algo nuevo y se aplicó años atrás en el país. Sin embargo, al igual que sus colegas, está consciente de que habrá resistencia entre las familias.

“Por lo menos yo he hecho un sondeo en mi sección y muchos no están de acuerdo con que vengan a jugar. Yo les digo que ahora no se les va a dejar tareas para llevar a casa. Todo lo harán aquí. No hay mucho apoyo de parte de los papás por el cambio”, precisó la educadora.

Añadió que, para aplicar adecuadamente la nueva forma de enseñanza en Parvularia, los centros como el de ella van a necesitar que les asignen fondos específicos para dotar de recursos a ese nivel.