Año nuevo, lucha nueva

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El equipo tigrillo, apiñado previo al duelo de este día. Foto: EDH

Por Por Teresa Guevara de López*

2014-01-04 6:06:00

Escuchamos con frecuencia la expresión “Año nuevo, vida nueva”, que lleva implícito algún propósito, cambio de actitud o abandono de malos hábitos, que con el optimismo del estreno, esperamos conseguir. Y casi siempre nos equivocamos porque seguimos siendo los mismos, con grandes defectos y débil voluntad.

Y como el mundo y la vida siguen igual. es más realista hablar de lucha nueva, de la firme decisión de combatir con nuevos bríos nuestros defectos para ser mejores, de esforzarnos por alcanzar metas más altas, que exijan mayor esfuerzo, y que este 2014 que estamos estrenando, sea como una página en blanco en el libro de nuestra vida, que iniciemos con buena letra, cuidando la puntuación, la ortografía y las mayúsculas, que equivalen a las virtudes que debemos luchar por adquirir para nuestro crecimiento personal, y poder ayudar a aquellos que dependen de nosotros.

Los salvadoreños tenemos importantes puntos de lucha que requieren especial atención en estas semanas previas a unas elecciones presidenciales que serán decisivas, pues de sus resultados depende que podamos seguir desarrollando nuestra democracia y vivir en libertad, dentro de un Estado de Derecho, por el que tanto hemos luchado.

Tarea difícil tras una pésima, larguísima e ilegal campaña política, en que ningún partido ha podido demostrar que merece nuestros votos, pues los planes de gobierno proponen atractivas medidas populistas de repartos y regalos, que engañan a la población, mientras evaden otras, poco populares, pero urgentes y necesarias, para alcanzar el desarrollo y salir de la pobreza.

Debemos luchar contra la fascinación del falso paraíso que promete el FMLN, continuando con los cambios y logros inexistentes de estos 5 desdichados años, en que el país ha descendido hasta los últimos niveles de crecimiento. Luchar para rechazar la falsa publicidad del Presidente Funes, agrandando su ego, atribuyéndose éxitos que sólo existen en su mente y en las fingidas voces de sus aduladores.

Luchar para entender que invertir en educación no está en los planes del Frente y que es ridículo creerles que habrá universidad en línea, cuando no alcanzan a pagar los sueldos de la UES, y la inutilidad de regalar miles de computadoras, si la mayoría de las escuelas no tienen Internet porque el MINED no puede pagarlo, y muchas carecen de energía eléctrica.

La situación del agro abandonado, de la energía eléctrica más cara, de los hospitales desabastecidos, de la incapacidad de funcionarios, que jamás conseguirían trabajo en la empresa privada, pues sus únicos méritos son pertenecer al partido o ser familiares de sus dirigentes. Que son los únicos que han salido de la pobreza, pues de guerrilleros se convirtieron, en muy pocos años, en millonarios, exhibiendo lujos inmerecidos, que son un insulto a la población trabajadora, pues se han comprado con nuestros impuestos.

Comprender que únicamente la empresa privada, grandes y pequeños empresarios, tiene la capacidad de generar empleo, única fuente de progreso y bienestar para toda la población. Y que a pesar de los muchos defectos que tengan, sólo en un clima de libertades podrán los ciudadanos criticar, protestar y exigir cambios y cuentas claras a los funcionarios, lo que jamás ocurrirá si nos sigue gobernando el Frente.

Que la lucha de cada uno en el 2014 nos permita abrir los ojos, ver la realidad objetiva, no dejarnos llevar por resentimientos ni prejuicios, actuar con madurez para elegir al futuro gobernante. Una nueva equivocación puede costarnos muy cara y luego será tarde para arrepentirnos. Que Dios nos ilumine y conceda un feliz año nuevo mediante una verdadera lucha nueva.

*Columnista de El Diario de Hoy.