LOS ÁNGELES. Para Miley Cyrus 2013 es sinónimo de irreverencia y destape. Este año la cantante ocupó las portadas por su polémica actuación sobre y abajo del escenario.
El viernes pasado se presentó en el concierto Jingle Ball 2013 de KIIS FM en el Staples Center y nuevamente llamó la atención al presentar un show navideño muy a su estilo.
La cantante de 21 años hizo el famoso twerk a un Papa Noel muy desinhibido y bailó eróticamente con una duendecilla y una bailarina disfrazada de reno. Sus bailarines le acompañaron con atrevidos atuendos.
Miley portó en el escenario diminutas prendas que dejaron muy, pero muy, poco a la imaginación: un conjunto de top y calzón con lentejuelas rojas ad hoc a la temporada acompañado por botas con cadenas y una gran bolsa de peluche de la marca Chanel. Su micrófono lo decoró como un gran caramelo. —EDH