El exceso de producción de café en Brasil, Colombia, Vietnam e Indonesia ha provocado tal nivel de oferta que ha obligado a que desciendan los precios del grano a nivel internacional.
Pero la caída de los precios a nivel mundial también tiene un impacto directo en El Salvador, por la baja en el ingreso de divisas provenientes de la venta de café y la reducción en la oferta de trabajo en las fincas.
Los precios que hace una semana iban de $110 a $115 por quintal, para esta semana descendieron a $104, cifras muy distantes de lo $150 en los que se valoraba en noviembre de 2012, según Marcelino Samayoa director de la Asociación de Beneficiadores y Exportadores de Café (Abecafé).
El cafetalero detalló además que si se basan en la ley de oferta y demanda, los precios del quintal podrían bajar hasta los $100 o $90.
Lo que preocupa a los productores, es que los precios que se manejan a nivel internacional están por debajo de los costos de producción, hecho que incide en una disminución en la inversión de las fincas cafetaleras.
“En el caso de los productores, al tener menos producto para exportar las utilidades se convierten en pérdida, y al final es el país el que termina perdiendo”, advirtió Samayoa.
Además los niveles de exportación, que al cierre del año pasado fueron de 1.5 millones de quintales, podrían descender a 800 mil en 2013.
Sin ente controlador
La falta de un organismo que regule la oferta y la demanda del grano a nivel mundial agudiza la situación.
“En el pasado funcionaba la Organización Internacional del Café (OIC) que restringía las exportaciones, veía que se mantuviera la demanda, las ofertas y los precios estuvieran estables”, comenta Sergio Ticas, de la Asociación Salvadoreña de Café.
Pero en la actualidad la OIC ya no funciona como un ente económico, es decir no regula los flujos de producción y oferta del café en el exterior.
“Nada más funciona como un foro internacional del café, y siempre es una institución que recolecta estadísticas cafetaleras, ya no como un ente regulador”, agregó Ticas.
El gremio caficultor considera que una de las opciones que tiene el sector es negociar con la banca nacional y privada, para la obtención de créditos.
Como asociación incluso han negociado el otorgamiento de créditos blandos, ampliación de años plazo y la disminución de los intereses del 7 % al 4 %, para sanear la crisis de bajos precios y problemas de la cosecha.
“Nosotros a la banca le hemos dicho que no queremos condonación, los caficultores queremos honrar nuestra deuda y ellos nos han hecho ver que tienen que cuidar el dinero de sus clientes”, dijo.
El representante de la asociación indicó además se trabaja un plan de seguridad para hacerle frente a los asaltos y las extorsiones. En este momento existen entre 15 y 20 denuncias interpuestas ante la Fiscalía General.