Difundir y profundizar en el conocimiento de la hemostasia y la trombosis en Latinoamérica para mejorar la atención de los pacientes fue el propósito del vigésimo tercer congreso organizado por el Grupo Cooperativo Latinoamericano de Hemostasia y Trombosis (CLAHT).
“La idea (de la convención) es conocer avances, cómo deben ser tratados estos pacientes y cual es al condición ideal (para tratarlos), dijo Carlos Martínez Murillo, presidente del Comité Organizador.
La hemostasia es la capacidad del cuerpo para detener los procesos hemorrágicos. Y la trombosis se refiere a la formación de un coágulo de sangre en el interior de un vaso sanguíneo.
Martínez destacó que en este tipo de encuentros “surgen protocolos de investigación en un ambiente de camaradería”.
CLAHT es un grupo de carácter internacional constituido por representantes de Latinoamérica. Su objetivo es promover el conocimiento sobre ambas patologías.
En cada país hay grupos de trabajo y el Grupo Cooperativo trata de agruparlos, de ahí parte de la importancia del congreso, que se realiza cada dos años o de los simposios. Estos últimos son anuales y se ejecutan en un país, en el cual se busca reforzar el conocimiento de ambas patologías.
La presidenta del CLAHT, Arlette Ruiz de Sáez, expone la importancia de que los profesionales de la salud tengan conocimiento de las patologías, ya que esto puede derivar en la calidad de vida los pacientes.
“Si no lo diagnosticamos no lo podemos tratar”, opinó Ruiz. Para ejemplificar expuso la enfermedad de Von Willebrand, un problema hemorrágico.
“Se supone que es frecuente, pero cuando vemos la estadísticas hay poco”, comentó la doctora. Añadió que el sangrado uterino es un motivo frecuente en las consultas ginecológicas; pero a veces no se identifica que tienen un trastorno hemorrágico que se debe diagnosticar y tratar.
“Una menstruación abundante lo consideran normal en la familia. Son mujeres con anemia y les afecta la calidad de vida. La consulta les da temor, vergüenza. Consideran que es normal tener un sangrado abundante y no lo consideran diferente porque su mamá tuvo el mismo problema”, apuntó la presidenta del CLAHT.
El Grupo Cooperativo también cuenta con un programa de becas de iniciación o de perfeccionamiento sobra ambas patologías dirigido para profesionales.
“Al mejorar el conocimiento de la hemostasia y la trombosis en Latinoamérica mejoramos la atención de los pacientes”, dijo Ruiz.
El Grupo Cooperativo también recomienda que cada médico hematólogo pueda dar educación continua a los profesionales de su hospital; de esa forma cuando el paciente llegue a la sala de emergencia pueda recibir un diagnóstico correcto.
La importancia de educar sobre estas enfermedades, también abarca a la familia del paciente; ya que ellos pueden identificar los signos y síntomas y buscar ayuda médica. —Evelyn Chacón