PAKISTÁN. El exgeneral golpista paquistaní Pervez Musharraf, que comandó el país entre 1999 y 2008, fue formalmente acusado ayer por un tribunal de conspiración para asesinar a la exprimera ministra Benazir Bhutto, muerta en un atentado en 2007.
Musharraf acudió ayer al Tribunal Antiterrorista de Rawalpindi (ciudad vecina a Islamabad) para oír junto a otros siete encausados los cargos, de los cuales se declaró no culpable antes de volver a su domicilio, donde permanece arrestado desde abril.
“Esto es simple venganza de los jueces, comandados por su máximo responsable, Iftikhar Chaudhry (presidente del Tribunal Supremo)”, afirmó a la agencia EFE un portavoz de Musharraf, Rashid Qureshi, quien aseguró que la justicia paquistaní está “totalmente sesgada” en este caso.
Siendo jefe de Estado, Musharraf destituyó en 2007 a Chaudhry y supuestamente ordenó el encarcelamiento de decenas de jueces, lo que le ha valido otro proceso judicial que se mantiene abierto.
Bhutto murió el 27 de diciembre de 2007 junto a otras 24 personas a manos de un terrorista suicida de 15 años que hizo estallar una carga explosiva tras un mitin en Rawalpindi, poco después de que la exjefa de Gobierno pusiera fin a años de exilio.
Desde un principio se relacionó a Musharraf con el magnicidio, pero su salida del país en 2009 paralizó los procesos judiciales. —AGENCIAS