Cultura de El Salvador en Teresópolis

Parte de la delegación nacional mostró "El Sombrero azul" en la Semana Misionera

descripción de la imagen
Una de las peregrinas salvadoreñas enseña un baile a un joven venezolano. foto edh

Por Roger Herrera Enviado Especial de El Diario de Hoy y Radio Paz en Brasil

2013-07-18 11:00:00

Ayer el Grupo 1 de la delegación Peregrinos de la Paz compartieron parte de la cultura salvadoreña, cuando a manera de exposición introdujeron algunos cantos, como “Había un sapo”, y dinámicas que se acostumbran a compartir en ambientes juveniles.

Asimismo, explicaron a los lugareños de Teresópolis y los peregrinos de otras delegaciones el significado de los símbolos patrios, lugares emblemáticos como el monumento al Salvador del Mundo, así como figuras del folklore salvadoreño como la Siguanaba y el Cipitío.

Le siguió la descripción de las ya famosas pupusas y la clase participativa sobre algunas palabras más autóctonas que tenemos.

Los venezolanos y uno que otro brasileño rápidamente cambiaron el típico “qué chévere” o “qué bacano”, por “qué chivo”, y aprendieron a decirle “volado” a cuanto instrumento o cosa se encontraban enfrente.

Este compartir cultural hizo que todos los presentes aplaudieran cordialmente, pero logró que dejaran sus asientos y se pararan a bailar, cuando se presentó la coreografía de la canción “El Sombrero Azul”, en la versión tropical más contemporánea del grupo Salsa Clave. Todos los presentes gritaba a todo pulmón “dale”, cada vez que terminaba el coro “Pero dale Salvadoreño”.

Palmas y baile acompañaron la jornada de la mañana de ayer. Un lenguaje común para todo joven y que unifica aún más a los participantes de esta Jornada Mundial de la Juventud. Esa es la juventud que recibirá dentro de poco la visita de Su Santidad el Papa.

El inicio del intercambio

Las actividades culturales comenzaron el miércoles por la noche, cuando el país anfitrión mostró expresiones de sus distintas zonas.

Música del compositor Héctor Villalobos, alabanzas a la Virgen Santísima en un ritmo de samba y la presencia de la primera “Portabandera” del Carnaval de Petropolis, un personaje icónico que este año cumplió setenta años, fueron algunas de las demostraciones que ofreció el país anfitrión.

Para luego dar pie ayer a la cultura salvadoreña, que está presente en este encuentro.