Diez personas, entre reos y custodios judiciales, reciben tratamiento contra la tuberculosis, confirmó ayer Julio Garay, jefe del Programa Nacional de Tuberculosis del Ministerio de Salud (Minsal).
“Todos fueron tratados, investigamos a todos los contactos del Centro (Judicial Isidro Menéndez), al igual que a su familia y se enviaron a sus casas por 15 días”, comentó Garay.
Agregó que en junio se detectaron los primeros casos de infectados y a partir de ahí empezaron a investigar a los agentes de seguridad y los contactos. El lunes, los reos que estaban en las bartolinas del Centro Judicial Isidro Menéndez fueron evacuados.
El tratamiento contra la tuberculosis dura seis meses, pero después de 10 días, el bacilo causante ha perdido la capacidad de contagiar a otra persona si se ingiere el medicamento, según las autoridades de Salud.
Garay expresó que en total han sido detectados 50 casos sospechosos, entre familiares de reos, custodios y vecinos.
El año pasado, el Ministerio de Salud detectó 205 reos con el bacilo.
El riesgos de propagación en los penales es mayor por el hacinamiento.
La tuberculosis es una enfermedad pulmonar que se trasmite por el aire cuando una persona enferma tose, estornuda o habla.
El principal signo es tos y flema por más de 15 días, pérdida de peso, desgano de trabajar, fiebre y sudoración por la noche.