LOS ÁNGELES. Todo el mundo sabe que Lindsay Lohan es adicta a las drogas y el alcohol. Pero muy pocos saben cuándo fue que la actriz y cantante tuvo su primer contacto con esas sustancias prohibidas.
Según Michael Lohan, padre de la artista, su hija comenzó a usar drogas hace ocho años, cuando estaba en pleno rodaje de la película “Just My Luck”, en 2005. Michel reveló esta información a la revista “The Sun”.
Ese era el primer filme que Lindsay filmaba tras la separación de sus padres, algo que la afectó mucho.
“Lindsay estaba filmando en New Orleans y me llamaron diciéndome que tenía una sobredosis de cocaína. Uno de sus asistentes le había dado la droga. Estaba tan enojado que tomé una pistola de la casa y pensaba ir hasta allá para matarlo, no podía creer lo que le había pasado a mi hija, estaba muy enojado”, explicó Michael, quien también ha luchado durante años con sus propias adicciones.
La versión del padre de Lindsay contradice a la de la actriz de 27 años, pues según ella, su primera vez con la cocaína fue a los 21 años y sólo la ha consumido unas “cuatro o cinco veces”.
Ella se encuentra por sexta vez recibiendo rehabilitación contra los analgésicos, el alcohol y las drogas. —EDH