Avianca alista 90 vuelos adicionales para ‘hub’ en el país

Ante esta decisión CEPA prepara una inversión de $1.4 Mlls.

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La terminal de pasajeros busca acelerar sus procesos de atención. FOTO EDH / MARVIN RECINOS

Por Juan José Morales negocios@eldiariodehoy.com

2013-07-17 10:00:00

Como parte de sus proyectos de expansión y el fortalecimiento del centro de conexiones (hub) de Avianca en El Salvador, el Aeropuerto Internacional en Comalapa comenzará a recibir 90 vuelos adicionales cada semana, según confirmó ayer la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA).

Esas proyecciones se dan tras el anuncio de la principal aerolínea de la región de eliminar su hub en San José, Costa Rica y obligarán a la institución a invertir en los próximos meses $1.4 millones para ajustarse a esta demanda, como parte del programa de modernización de la infraestructura aeroportuaria.

A finales de junio, el presidente de la junta directiva de Avianca, Roberto Kriete, afirmó que se reforzaría el centro de conexiones en El Salvador al ritmo que se prevé que crecerá el Aeropuerto Internacional El Salvador.

Para el empresario, el desarrollo del centro de conexiones de vuelos ha requerido “montos extraordinarios de inversiones productivas”, y aseguró que otros países de Centroamérica le han pedido a lo largo de los años establecer hubs en sus aeropuertos, pero lejos de eso Avianca ha optado por fortalecer el de El Salvador con más vuelos a ciudades de Norte y Sudamérica, como Cali, Guayaquil, y posiblemente Las Vegas en el futuro cercano.

Para Kriete lo que se necesita con urgencia es el recarpeteo de la pista, sustituir los puentes de desembarque y renovar el equipo tecnológico, entre otros aspectos.

Mientras el aeropuerto “se ha dejado que se deprecie a un punto horrible”, según palabras de Kriete, otros como el Internacional Tocumen, de Panamá, y el Juan Santamaría, de Costa Rica, se han desarrollado a pasos agigantados.

Tocumen espera duplicar su capacidad para poder darle servicio a 18 millones de pasajeros para el 2016 con un agresivo plan de inversiones. A mediados de febrero pasado inició la construcción de la Terminal Sur, que contempla una infraestructura comercial y hotelera con una inversión de $679 millones.

En el aeropuerto Juan Santamaría construirán otras dos salas de abordaje con sus respectivos puentes de contacto, para recibir aviones más grandes. Las nuevas instalaciones podrán atender a 260,000 pasajeros por año y aumentarán en 18% la capacidad de las salas de abordaje. El costo ronda los $18 millones.

En El Salvador, el año pasado CEPA comenzó los trabajos de renovación del aeropuerto que incluyen los baños públicos, la mejora del aire acondicionado, la instalación de un elevador y la construcción de un área de “food court”; pero aún queda pendiente la presentación y ejecución del Plan Maestro de Ampliación por parte de la firma contratada para tal fin.

Lo que viene

Para ir en sintonía con el incremento de operaciones de la aerolínea y la ampliación, CEPA se encuentra analizando mecanismos para responder ante el incremento de vuelos y está dispuesta a invertir para potenciar la capacidad del aeródromo.

En ese sentido, Carlos Federico Paredes, asesor de la presidencia de CEPA señaló que se comenzará con la ampliación de las 15 salas de espera de pasajeros y la adquisición de equipo de pistas e incluso la contratación de personal especializado, dado que aumentará el flujo de pasajeros en transbordo.

La autónoma espera sustentar esta inversión con el flujo de caja que genere el aumento del tráfico aéreo y además con los $58.2 millones que obtuvo a principios de año con la titularización en la Bolsa de Valores.

Por ello, existe la posibilidad de que también se acomode el área de migración y aduana para volver más inmediatos los trámites de entradas y salidas del país, ya que en horas pico experimenta saturación.

Tanto CEPA como la Agencia de Promoción de Exportaciones e Inversiones de El Salvador (Proesa) confirmaron que ya está lista la política comercial del Aeropuerto, insumo con el que ambas instituciones buscan elevar los ingresos de actividades no relacionadas con el ‘despegue y aterrizaje de aviones’.

“La política está lista y con ello se pueden aumentar las utilidades aeroportuarias en un 25%”, reconoció Giovanni Berti, director ejecutivo de Proesa.