SAN MIGUEL. La burocracia estatal mantiene en vilo a cinco familias que, a criterio de Protección Civil municipal, ya debieran haber sido evacuadas.
Ayer Óscar Portillo detalló que la comisión que coordina ya envió un requerimiento para que la gobernación gestione 151 láminas y la madera que se necesita para hacer las champas provisionales.
Según Portillo, la evacuación de las cinco familias dependerá de la rapidez con la que se obtengan los materiales para construirles los hogares temporales.
Las familias se asentaron en una propiedad municipal que está a las orillas del parque Las Placitas, situado en el cantón El Carreto.
El problema es que están justo en el trayecto por donde pasan las correntadas de lodo que bajan de las faldas volcánicas, lo que los pone en un serio peligro.
Por ahora los deslaves están controlados, gracias a las obras que realizaron para minimizar el riesgo; sin embargo, Protección Civil prefiere evacuarlas del lugar, para no dar espacio a desgracias.
Ayer en la gobernación no hubo quien explicara cómo avanza la gestión de esos materiales.
Portillo señaló que además de esas cinco familias, también hay otros siete grupos familiares que podrían verse afectados con nuevos deslaves. Se asentaron frente al parque, en una propiedad estatal por donde pasa el lodo.