Surf deja ingresos por $20 millones en el país

La cifra lograda entre abril de 2012 y abril de 2013 duplica a la de hace 5 años

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El país tiene 200 kilómetros de playa que pueden ser explotadas con el turismo basado en el surf. foto edh / mario amaya

Por Karla Argueta nacional@eldiariodehoy.com

2013-05-31 9:00:00

Alrededor de $20 millones le generó el surf a El Salvador entre abril de 2012 y el mismo mes de 2013, casi el doble de lo que el país logró hace cinco años. De acuerdo con un estudio financiado por el programa All Invest y desarrollado por el Grupo Amate en coordinación con la Corporación de Exportadores de El Salvador (Coexport), este deporte ha impulsado el turismo y la inversión en aproximadamente 200 kilómetros de la costa salvadoreña, entre las playas Las Flores y Mizata.

Sin embargo, los empresarios afirman que la deficiente infraestructura en servicios básicos, la falta de promoción y el escaso apoyo financiero, así como la burocracia les impide explotar más el potencial que ofrecen las olas salvadoreñas.

Carlos Ortiz, director comercial de la Corporación Turística El Amate, aseguró que entre abril de 2012 y abril de 2013 la actividad generó un flujo de turistas de hasta 32,000 personas, 60 % extranjeras y el resto nacionales.

Los primeros dejaron ingresos por $12 millones al centenar de negocios que operan en la zona, mientras que los locales aportaron otros $8 millones. La preferencia por las playas salvadoreñas para la práctica del surf la revela no solo el aumento de los ingresos, que pasó de $11 millones en 2008, a $20 millones en 2012; también se nota en el incremento de la estancia promedio de los turistas.

Según la investigación, el promedio de la duración de una visita era de 5.5 días hace un lustro y ahora se ha incrementado a 6.82.

El estudio presentado ayer destaca que hace cinco años un visitante gastaba en consumo y alojamiento un promedio de $58.15, mientras que hoy invierte $82.23, es decir, un 29 % más explicó Ortiz, quien detalló que el aumento obedece a que los empresarios están invirtiendo más en sus instalaciones y en ofrecer servicios que los ubiquen entre hoteles superiores y de primera, y ya no solo en el rubro económico, para satisfacer al famoso mercado “mochilero”.

De hecho, el número de establecimientos también se ha elevado significativamente. El último estudio indicaba la existencia de entre 60 y 80 negocios en la zona surfera, pero el nuevo documento revela que hasta abril de este año habían 150. La mayor parte de los sitios han surgido en los últimos dos años, dijo el director comercial de Amate.

Aunque la práctica del surf lleva más de treinta años en El Salvador, el país logró ser más visible en la industria mundial con la celebración de campeonatos de surf, a partir de 2005. El último torneo fue celebrado en 2011. En esa ocasión la audiencia alcanzó los 34 millones de personas, y los quince días del torneo generaron un impacto de $300,000 dólares a la zona, indicó Ortiz; sin embargo, por la falta de financiamiento y apoyo del sector público, las empresas de turismo no han vuelto a montar un evento de esa categoría, se quejó.

Pese a los números favorables para El Salvador otros países le están comiendo el mandado. Costa Rica, Panamá y recientemente Nicaragua, han redoblado sus esfuerzos por atraer visitantes, afirmó Salvador Castellanos, quien ha ingresado hace un par de años a la industria con la escuela “Puro Surf”, en la playa El Tunco.

Castellanos asegura que una de las principales dificultades para hacer crecer sus negocios es la falta de acompañamiento de algunas instituciones estatales de financiamiento que prometen ser la solución, pero que exigen demasiados requisitos o solicitan elevados montos de inversión.

“Somos optimistas huérfanos”, enfatizó.

Otra de las dificultades que complica a los empresarios es la deficiente infraestructura para tener servicios básicos de manera regular.

La mayor parte de los establecimientos obtiene agua potable de pozos y trata las aguas negras mediante fosas sépticas. Por el otro lado, el servicio de energía eléctrica es deficiente y con tarifas elevadas.

Roberto Rotherham, uno de los empresarios más antiguos en el Puerto de La Libertad en el rubro del surf con su hotel y restaurante Punta Roca aseguró que al país le hace falta promoción y publicidad, así como reconocer que los surfistas son verdaderos turistas que dejan jugosos ingresos al país como cualquier otro.