SAN MIGUEL. A pesar de que el secretario de vulnerabilidad de la presidencia de la República, Jorge Meléndez, decretó alerta naranja en el volcán Chaparrastique, las obras de mitigación que se debieron haber iniciado entre hoy y mañana, fueron atrasadas por algunos días, debido a la burocracia estatal.
Óscar Portillo, de Protección Civil municipal, explicó que el Fondo de Conservación Vial (Fovial) decidió darle mantenimiento a su maquinaria antes de iniciar los trabajos. La revisión se inició ayer y han previsto que termine mañana.
La declaratoria de emergencia se extenderá durante todo el invierno en la zona norte y noreste del cono volcánico, donde se encuentran comunidades muy vulnerables ante los deslaves que se vienen registrado desde hace tres semanas, cada vez que hay una tormenta, aunque no sea fuerte.
Estas comunidades son los cantones El Volcán, El Conacastal y La Morita, además de los caseríos Las Piedritas, La Cruz, Las Placitas, Conacastal y la lotificación Hércules que pertenecen a los municipios de San Miguel, Chinameca y San Jorge, detalló Meléndez.
La correntada de lodo más reciente se registró el jueves a las 6:30 de la tarde y afectó al menos 10 viviendas del cantón El Carreto que, aunque recibieron la descarga de lodo, las autoridades sostienen que solo sufrieron daños menores. Pero en ese sector, hace una semana también fueron anegadas por otra correntada similar.
Ayer Juana María Cabrera aún no salía del estupor, porque la corriente de lodo atravesó el patio de su vivienda de láminas y apenas le permitió salir junto a sus dos hijos.
“Llovió como media hora y empezamos a escuchar estruendos y le dije a los cipotes que corriéramos: solo tuvimos unos segundos para huir”, dice, mientras recuerda que pasó la noche a la intemperie, junto a sus vástagos.
Adrián Benítez, otro habitante de El Carreto, dijo que en esta ocasión fue una mayor cantidad de lodo la que recorrió los pasajes del cantón y la calle que de San Miguel conduce a San Jorge.
De hecho, el paso por esa vía fue interrumpido casi toda la noche, porque la capa de lodo que la cubrió era de casi un metro de profundidad.
Protección Civil reportó una mujer lesionada que resultó herida mientras trataba de huir del alud de lodo.
Un albergue inseguro
La misma noche del jueves otra pequeña corriente de lodo alcanzó al centro escolar Federico García Prieto, donde los estudiantes, ayer, colocaban una pequeña barricada con sacos repletos de arena.
Lo irónico del caso es que la directora Marisol Velásquez estaba afanada porque sus alumnos protegieran la escuela, porque ha sido destinada como albergue para el cantón El Volcán, en caso de que sea necesario evacuar a las familias del lugar.
La declaración de la alerta naranja implica que las escuelas de la zona podrían suspender las clases durante el invierno y que se activen las comisiones municipales y departamentales de Protección Civil.
Óscar Portillo precisó que entre hoy y mañana se instalarán un centro de operaciones en un centro escolar de la zona, desde donde controlarán lo que pasa y lo que a su criterio les dará una mejor capacidad de respuesta.
Aunque los lugareños temen lo que pueda pasar este fin de semana, debido a que las autoridades han dicho que se espera mucha lluvia.
El jueves sólo llovió media hora y cayeron 35 milímetros de agua y según las fuentes de Protección Civil, durante el fin de semana se esperan tormentas más fuertes.
Los trabajos de mitigación se iniciarán el martes, debido a que el lunes es asueto.
El gobernador en funciones Evaristo Romero dijo que la comisión departamental de Protección Civil ya tiene un plan claro a seguir y estima que la limpieza de gaviones les tomará unos 15 días.
Portillo indicó que ayer mismo se reunió con el alcalde en funciones de San Miguel, Antonio Durán, para explicarle qué es lo que la comuna debe hacer en este caso.
“Gracias a Dios en la alcaldía se tiene bien claro que hay que meterle mano a este asunto”, dijo.
Quien se mostró satisfecho por esa declaratoria es el edil de Chinameca, Saúl Rivas. El se ha quejado de la gobernación migueleña, donde no encontró respaldo para mitigar riesgos en su municipio.
“Sabemos que con esto no se va a resolver el problema, pero algo se hará”, dijo.
Tanto Rivas como Portillo explicaron que las alcaldías estaban maniatadas para invertir recursos sin una declaratoria de emergencia, debido a que “muchas de las zonas donde hay que intervenir son propiedades privadas y la Corte de Cuentas nos iba a joder si metíamos dinero ahí”, dijo el edil Rivas.
El gobernador en funciones señaló, al cierre de esta nota, que estaban por iniciar una reunión con toda la comisión departamental, para ordenar el trabajo que realizarán en los próximos días.
Añadió que el resultado del estudio técnico hecho por geólogos, vulcanólogos y técnicos en otras áreas, llegó a su despacho hace dos días y negó que la tardanza con la que han actuado sea por descuido.
Explica que era necesario realizar este estudio, pero la comisión municipal de Protección Civil advirtió del riesgo en marzo, casi un mes después de que un incendio consumiera la vegetación en un poco más de 500 hectáreas de la parte más alta del volcán.
El gobernador de turno, Sergio Benavides, minimizó el informe, al asegurar que se basado en elucubraciones.
Fue la alcaldía migueleña la que pidió decretar emergencia. Quienes viven en riesgo incluso sospechan que no se hará nada para reducir el riesgo.