Con el fin de impulsar una cultura de debate en el país, El Diario de Hoy y Glasswing apoyan el Club de debate, el cual llevó a cabo su segundo torneo.
La jornada inició el pasado sábado 22 de junio y finalizó ayer a las 3:00 p.m.
Al empezar la iniciativa se inscribieron 60 jóvenes de distintos centros escolares del país, tanto de tercer ciclo como de bachillerato, pero con las pruebas de los dos sábados anteriores se redujo el número de participantes.
El tema a debatir fue sobre la existencia o no de bibliotecas en los centros penitenciarios.
Los ganadores de la categoría tercer ciclo fueron el equipo de tres jóvenes del Complejo Educativo Marcelino Flamenco, y de bachillerato, el Complejo Educativo Walter Arturo Soundy.
Ambos defendieron la postura en contra de las existencia de bibliotecas en cárceles.
Sus argumentos se enfocaban en que no era prioridad un espacio con libros, si no más bien la salud de todos los reclusos.
Los equipos de debate se prepararon durante dos meses con un “coach” o entrenador, quienes son voluntarios de Glasswing. Ellos asesoraron a los jóvenes sobre técnicas de expresión.
Al final de la jornada los participantes recibieron diplomas y medallas de reconocimiento.
El Director Ejecutivo del Grupo Editorial Altamirano, Fabricio Altamirano, motivó y felicitó a los jóvenes de los centros escolares.
“Se debe construir una cultura de debate, no basada en la violencia del país”, señaló el ejecutivo, e hizo hincapié en poner en práctica lo aprendido en el Club de Debate.
Altamirano sorprendió a los jóvenes al final de la premiación, ya que les regaló Ipads a los dos primeros lugares.
Experiencias de oro
Los estudiantes reconocen que el Club de Debate les ha enseñado a expresar sus ideas con respeto hacia los demás.
Joaquín Bonilla, estudiante del C. E. Walter Soundy, pertenece al equipo que ganó por segundo año consecutivo el primer lugar. Él aseguró que se siente satisfecho del papel que realizó con su equipo y que planean seguir participando en los próximos torneos.
Eneyda Rivera, del Complejo Educativo República de Canadá, afirmó que “hoy puedo expresar mejor mis ideas. Me han enseñado a hablar con claridad y a ser tolerantes con mis compañeros. El Club de Debate nos abre la mente”.SAN SALVADOR. La parroquia María Auxiliadora, conocida como Don Rúa, culminó el Congreso Eucarístico parroquial con tres actividades de reflexión para los participantes.
La primera inició a las 8:30 a.m., fue una jornada de adoración al Santísimo Sacramento, la cual fue dirigida por los diversos grupos y movimientos del templo.
Ésta finalizó a las 4:00 p.m., ya que le dieron paso a la exposición de vídeos sobre milagros eucarísticos.
Los feligreses conocieron detalles sobre “las maravillas que ocurren en torno a Jesús eucaristía”, así lo relató Sebastián Alfaro, asistente.
Luego el párroco, Mariano Miranda, ofició la misa solemne para clausurar el congreso.
“Nos estamos preparando para el congreso nacional, ahora solo lo hemos hecho a nivel de nuestra parroquia. Queremos festejar en agosto el centenario de la arquidiócesis”, detalló Miranda.
El evento de Don Rúa empezó el pasado 27 de junio con una misa y adoración eucarística.
El pasado viernes fue dedicado al 60 aniversario que cumple la parroquia.
Las actividades se realizaron en el marcó de los 100 años que cumplirá la Arquidiócesis de San Salvador.
Para conmemorar el centenario los sacerdotes capitalinos organizarán un congreso nacional el próximo agosto de este año.
Un templo con historia
Las iniciativas para su edificación comenzaron en 1949, ya que la Congregación Salesiana se había comprometido con los dominicos, primeros responsables del lugar, a construir un templo dedicado a San Miguel Arcángel.
La primera piedra de este templo se colocó el 1 de noviembre de 1950. Año y medio después fue bendecida e inaugurada la cripta o capilla inferior del templo.
Hasta la fecha, ha contado con 17 párrocos, siendo el primero de ellos el sacerdote José Garzena.
Los feligreses comentaron que es una dicha pertenecer a una parroquia con tantos años, “recuerdo que de pequeña mis papás me traían aquí. Hoy de grande sigo siendo fiel a Don Rúa”, contó Clelia Ruano.
En parroquia han surgido numerosas asociaciones de jóvenes y diversas comunidades cristianas que trabajan en la evangelización.